El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha pedido al ministro de Cultura y Deporte en funciones, Miquel Iceta, que «esté más pendiente de la gestión de su ministerio y del deporte femenino y menos de los chantajes de Puigdemont al PSOE», a la vez que ha reclamado «dinero y no excusas» para la Copa Solheim de golf femenino que se celebra este fin de semana en la Costa del Sol.
«Lo que ha ocurrido con la Copa Solheim es el retrato perfecto del Gobierno de Pedro Sánchez: mucho postureo, mucho falso feminismo, pocos hechos y siempre primar a Cataluña por encima de Andalucía y del resto de territorios por el chantaje de sus socios», ha afirmado Salado a través de un comunicado, remitido a Europa Press.
El también presidente de la empresa pública Turismo Costa del Sol ha retado al Gobierno a explicar «dónde está el dinero» que dice haber comprometido para esta importante competición internacional. «Todo el mundo, todas las administraciones, han aportado dinero, mucho dinero, para que se celebre esta competición. El Gobierno de Pedro Sánchez lo único que ha aportado son palabras, promesas que se han ido incumpliendo e insultos», ha apuntado.
«Si el ministro Iceta y su equipo hubieran hecho su trabajo, la Copa Solheim habría recibido ya las ayudas estatales correspondientes y no una promesa de pago a futuro cuando ya hayan transcurrido meses desde su celebración», ha lamentado Salado, que ha recordado que sí ha habido una partida presupuestaria y un compromiso del Consejo de Ministros para avalar la Copa Ryder de golf masculino que celebrará Cataluña en 2031. «Los hechos hablan por sí solos, el agravio es escandaloso», ha dicho.
Salado ha recordado que la propia organización de la Copa Solheim ha informado en los últimos días de que la aportación del Gobierno a la mayor competición internacional de golf femenino ha sido «cero ayudas», frente a los 2,1 millones que aporta la Junta de Andalucía, los dos millones que ponen, respectivamente, la Diputación de Málaga y la Mancomunidad de la Costa del Sol, y los 1,5 millones que han abonado, respectivamente, los ayuntamientos de Marbella y Benahavís.
«Todas las administraciones han puesto dinero, menos el Gobierno que sólo ha puesto excusas, mentiras e insultos», ha manifestado Salado, que no obstante ha celebrado que las «críticas unánimes» hayan hecho reaccionar, «aunque tarde y mal», al Ejecutivo en funciones.
«Llevamos cinco años trabajando en esta candidatura y han pasado tres años desde que la Costa del Sol fue elegida para acoger el evento. El Gobierno ha tenido tiempo de sobra para tramitar la ayuda, lo que le han faltado han sido ganas y voluntad», ha agregado el presidente provincial.
Asimismo, ha lamentado que el ministerio y el Consejo Superior de Deportes «no hayan tenido la valentía de dar la cara ni siquiera cuando han querido atacarme e insultarme», pero ha celebrado que sus críticas hayan servido «al menos para arrancar un compromiso de financiación, aunque sea muy a posteriori», para un evento que tendrá, ha dicho, «un impacto económico superior a los 500 millones de euros y alcanzará a una audiencia televisiva mundial superior a los 430 millones de espectadores».
«No vamos a permitir que dejen colgada por sistema a la Costa del Sol, no vamos a permitir que nos sigan ninguneando y atacando, que no haya las inversiones que necesitamos, como tampoco las hay en materia de movilidad, de ferrocarril o de lucha contra la sequía», ha concluido Salado.