La Diputación de Málaga destina 300.000 euros para apoyar a una veintena de parques y centros de ocio, aventura y naturaleza de la provincia, que están sufriendo también las graves consecuencias de la pandemia.
El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha presentado la iniciativa junto al presidente de la Asociación Provincial de Empresas y Centros de Ocio de la Costa del Sol, Joose Yagüe, y ha explicado que es la mayor ayuda que la Diputación otorga a este sector, vital para el desarrollo turístico de la provincia, por lo que es fundamental su reactivación.
Y ha añadido que este apoyo se ha plasmado adquiriendo casi 20.000 entradas en 24 establecimientos, que se distribuirán el año próximo entre centros docentes, asociaciones y colectivos de toda la provincia.
En total, se han adquirido entradas para: AquaMijas, Aquapark, Aquavelis, Crocodiles Park, Selwo Aventura, Selwo Marina, Aventura Amazonia, Bioparc Fuengirola, Lobo Park, Teleférico Benalmádena, Cueva del Tesoro, Ferri Benalmádena-Fuengirola, Paseo de los Delfines, Kart And Fun, Costa del Sol Ocio y Karting, Parque de Mariposas, Reservatauro, Sea Life, Club Hípico el Ranchito, Spanish Night, Tablao Los Amaya, Taberna Flamenca Pepe López, Bus Turístico de Málaga y Museo Automovilístico.
Salado ha resaltado que los parques y la oferta de ocio en general constituyen un equipamiento de primer nivel para la Costa del Sol, ya que suponen un enorme atractivo y una importante fuente de creación de empleo. Además, en los últimos años se han puesto en marcha nuevos parques temáticos y centros de ocio y también se ha realizado una importante inversión en mejoras y ampliaciones en instalaciones ya existentes.
Así mismo, el presidente de la Diputación ha subrayado que “nuestros potenciales clientes nos demandan cada vez más actividades sostenibles y respetuosas con el medio ambiente y el entorno. El turismo sostenible, como el que ofrecen los parques de naturaleza, supone la oportunidad de potenciar el desarrollo de infraestructuras e instalaciones modernas, integradas en el paisaje y que faciliten un uso y disfrute inclusivo”.
Impacto económico del sector
Sobre la importancia de este sector, Francisco Salado ha indicado que, según la Asociación Provincial de Empresas y Centros de Ocio de la Costa del Sol, en circunstancias normales los parques de ocio y naturaleza de la provincia reciben cuatro millones de visitantes al año, facturan 70 millones de euros y emplean a más de 1.800 personas.
Además, un estudio realizado por Turismo Costa del Sol concluye que el gasto directo realizado por los turistas en los parques de ocio vinculados a la naturaleza de la provincia de Málaga (sin tener en cuenta el gasto que los residentes hacen en los mismos ni los gastos relacionados con el alojamiento, transporte u otros gastos realizados por esos turistas durante su estancia en la provincia) es de 18 millones de euros. A ello hay que sumar los impactos económicos indirectos en dichos parques, que ascienden a 17 millones de euros, y que suman un total de 35 millones de euros.
Este estudio incluye a los parques considerados como botánicos o zoológicos, entre ellos Bioparc, Sealife de Benalmádena, Selwo de Estepona, Cocodrilo Park de Torremolinos, el mariposario de Benalmádena y Lobo Park de Antequera.
Con respecto al empleo, el gasto de estos turistas genera 543 empleos totales.
Francisco Salado ha incidido en que se continuará reclamando al Gobierno que las empresas vinculadas al segmento de ocio, como también el segmento de golf, sean declaradas actividades turísticas, siguiendo la propia recomendación de la Organización Mundial del Turismo, que aconseja que obtengan esta denominación. De esta manera, se tendrían en cuenta en la elaboración de las estadísticas de turismo y en las iniciativas de apoyo y estímulo al sector.
“La pandemia ha producido efectos devastadores en el turismo, y por eso no podemos dejar de lado a nuestro motor económico, una actividad de la que viven 117.000 familias malagueñas y que genera casi el 15% de nuestro PIB”, ha concluido.
