Fuengirola cuenta desde hoy con un espacio urbano dedicado a la vecina Leonor Muñoz, asesinada en la localidad hace dos años a manos de su compañero sentimental, y a todas las víctimas de violencia machista. Se compone de un conjunto escultórico, ubicado en el bulevar Alcalde Clemente Díaz Ruiz, que ha sido creado por la artista local Dora López y que representa la unión de las personas para acabar con esta situación social, que cada año acaba con la vida de decenas de españolas.
El acto de inauguración ha sido presidido por la alcaldesa Ana Mula y ha contado con la presencia de la familia de la propia Leonor Muñoz. También han acudido al mismo la vicepresidenta primera del Parlamento de Andalucía, Esperanza Oña, la secretaria general de Familias de la Junta de Andalucía, Ana Carmen Mata, la delegada territorial de Igualdad de Málaga, María Dolores Fernández, así como los máximos mandos de la Policía Nacional y de la Policía Local en la localidad y agentes de la unidad destinada a luchar contra esta problemática social.
“Recuerdo, como si fuera ayer, cómo se me heló el corazón al conocer la noticia del asesinato de esta vecina–en enero de 2019-, y cómo la calle donde vivía y la plaza de España se llenaron de fuengiroleños mostrando su repulsa hacia este hecho tan atroz, hacia un crimen que sesgó la vida de esta mujer que tenía tantas cosas por hacer, tanto cariño que dar y que, precisamente hoy, hubiese cumplido 50 años”, ha explicado la regidora durante el acto de inauguración. En este sentido, Mula ha recordado “el clamor” en que se sintió en las calles de Fuengirola contra aquel suceso durante aquellos días, así como el compromiso que entonces adquirió con la familia para crear un espacio en memoria de Leonor. La ubicación elegida ha sido el bulevar Clemente Díaz, donde se alza ya el conjunto escultórico que trata de concienciar del camino que queda por hacer para acabar con esta problemática social.
No en vano, como ha proseguido, tras el levantamiento del último estado de alarma, “el número de mujeres asesinadas ha crecido de forma preocupante”. Según los datos del Ministerio de Igualdad, durante el pasado mes de mayo se registraron ocho muertes por violencia de género. Más del doble de las que se habían contabilizado desde que comenzó el año 2021.
“Estas cifras nos alertan de una realidad, que tenemos mucho que hacer aún en materia de concienciación, de igualdad. Por lo tanto, esta escultura, tiene más vigencia y sentido que nunca. Pretende lanzar un mensaje al mundo alto y claro: que Fuengirola es tolerancia, es respeto y es igualdad. Por eso, cada vez que ocurra un acto de violencia machista en nuestro país, esta bella obra cambiará el color de su iluminación en recuerdo de la víctima y en el de todas las mujeres que perecieron asesinadas por sus parejas o ex parejas”, ha manifestado la mandataria.
Durante el acto de inauguración, que ha comenzado con un minuto de silencio en memoria de las niñas de Canarias, Olivia y Anna, la alcaldesa ha transmitido a la madre de estas, “en nombre de todos los fuengiroleños, todo nuestro cariño y el apoyo más rotundo”. Igualmente, ha tenido palabras de ánimo a los familiares de Rocío, la joven sevillana de diecisiete años que lleva una semana en paradero desconocido y cuyo novio declaró ayer haberle arrebatado la vida.
Para terminar, Mula se ha dirigido a los familiares de la malograda vecina presentes, entre ellos su hijo, y les ha transmitido su agradecimiento “de corazón, por aceptar con generosidad que el recuerdo de Leonor pueda ser compartido por todos los fuengiroleños y por permitirnos que su espíritu, por medio de esta escultura, permanezca indeleble para siempre”.
Descripción de la obra ‘Leonor’ es una instalación formada por dos estructuras paralelas entre sí a modo de camino ondulante, construidas en acero. El tamaño de cada una de ellas es, en su parte más elevada, de 2,30 metros de altura por 10 metros de largo, con una separación entre una y otra de 1,80 metros, lo que permite al espectador caminar por su interior, uno de los objetivos fundamentales de su diseño.
La ornamentación que define el conjunto escultórico, marca un juego de formas geométricas creando un dinamismo visual de cuerpos orgánicos, femeninos y delicados, donde el simbolismo adquiere una enorme dimensión. Su estructura permite recorrerla, de modo que el espectador pueda atravesarla y ver a través de la celosía de las formas orgánicas que la componen, la realidad fragmentada que ven las mujeres víctimas de violencia de género.
El color blanco pone de manifiesto, la posición que adquiere esta propuesta artística en cuanto a la cercanía con lo espiritual. Entre sus características destaca, además de sus grandes dimensiones, la posibilidad de que cambie el color de su iluminación cada vez que se registre un crimen machista en España.
La autora
Dora López recibió su formación artística en la Escuela Artes Plásticas y Diseño San Telmo de Málaga y desarrolla su actividad en su estudio-taller, afincado en Fuengirola.
A lo largo de su trayectoria, ha protagonizado siete exposiciones individuales en diferentes puntos de la provincia de Málaga y ha participado en cerca de una veintena de muestras colectivas, también de ámbito provincial, así como seis ferias de arte, entre ellas la Art Jaén o la Hybrid Art&Fair de Madrid, entre otras.
López es una convencida defensora de la lucha contra la violencia de género, como demuestra buena parte de su producción y proyectos artísticos en los que ha trabajado, en especial, durante los últimos años.
Actualmente, esta artista dirige el Taller Municipal de Encuadernación Artística y Restauración de Libros del Ayuntamiento de Fuengirola. En 2020, recibió el premio ‘El valor de ser mujer’ por parte de la Concejalía de Bienestar Social y Familias de la citada institución municipal.
