· Los populares inician con los socialistas su ronda de contactos y a partir de la próxima semana hará lo propio con el resto de formaciones
· Patricia Navarro subraya que la provincia “está en un momento de crecimiento clave que requiere desbloquear proyectos e inversiones”
El Partido Popular de Málaga, encabezado por su presidenta, Patricia Navarro, ha trasladado este lunes al PSOE sus propuestas para una Alianza por Málaga en el primero de los encuentros con los dirigentes de los partidos políticos con representación parlamentaria y que continuará a partir de la próxima semana con el resto de formaciones.
Navarro ha recordado la importancia de esta propuesta en un momento crucial para la provincia, como lo fue en los años 90 el acuerdo entre dirigentes y cargos públicos de los grandes partidos para sacar a Málaga del bloqueo existente e impulsar una serie de grandes proyectos e infraestructuras claves para el desarrollo de Málaga.
Entonces, el Estado acometió, con la alternancia de gobiernos del PP y del PSOE, la llegada del AVE a Málaga, el soterramiento de las vías a su paso por la capital, la ampliación del aeropuerto, con la T3 y la segunda pista; la hiperronda, la culminación de la autovía del Mediterráneo en la Costa oriental, la autovía Córdoba-Málaga y la autopista de peaje de la Costa del Sol y de las Pedrizas, entre otras actuaciones.
Un momento que, ha recordado la presidenta provincial, coincidió con la sequía de 1995, una de las peores registradas y que conllevó también la ejecución de obras para aumentar los recursos hídricos, como el trasvase La Viñuela-Málaga, los de los ríos Guadalmina, Guadalmansa y Guadaiza al pantano de La Concepción, la desaladora de Marbella y la desalobradora de Málaga, la presa de Casasola o actuaciones incluidas en el plan de saneamiento integral.
Ahora, 30 años después, ha resaltado Navarro, Málaga “es una provincia pujante, líder y referencia no sólo en turismo sino en el ámbito empresarial, tecnológico, cultural y logístico internacional”; además de un polo de inversiones y la provincia que más población viene ganando en España en los últimos años. Es más, según las proyecciones oficiales del Instituto Nacional de Estadística (INE), se prevé que gane más de 300.000 nuevos habitantes antes de 2035.
Esto coloca a la provincia malagueña “en una encrucijada, un momento clave donde son necesarias y urgentes grandes inversiones públicas, especialmente por parte del Estado, con la ayuda de fondos europeos y con la coordinación del resto de administraciones”.
En este sentido, la presidenta popular ha situado como necesarias inversiones en Málaga y el área metropolitana en materia de movilidad, tanto en carreteras como en transportes públicos como los Cercanías, los servicios AVE y Media Distancia e incluso el Metro, que lidera la Junta de Andalucía con apoyo financiero del Estado; y el Eje Litoral. Pero también son fundamentales, ha subrayado, las grandes inversiones incluidas en el Plan Hidrológico Nacional “para garantizar el suministro de agua no sólo a la población actual sino a la prevista y a los sectores productivos, como la industria turística y la agroalimentaria”.
La máxima dirigente provincial ha aludido a la importancia del turismo, con 14 millones de viajeros cada año y una actividad económica anual superior a los 19.000 millones de euros que permiten mantener más de 128.000 empleos; una realidad que requiere también de actuaciones en mantenimiento y protección del litoral y en seguridad.
A su juicio, es “imprescindible” acometer los proyectos previstos “si no queremos estrangular el desarrollo de la provincia y su prosperidad ni empobrecer la calidad de vida de la que disfrutan los malagueños y los visitantes”.
Igualmente, ha incidido Navarro, desde las administraciones públicas “hay que paliar los desequilibrios y tensiones territoriales, sociales y económicas que se pueden estar produciendo por este crecimiento” mediante políticas, inversiones y una planificación urbanística “que permita a los jóvenes y a las familias acceder a una vivienda a precios asequibles”.
El PP ha propuesto a los socialistas una Alianza por Málaga para que los partidos políticos con representación parlamentaria, “desde la legítima discrepancia ideológica y política”, trabajen “como hicieron en el pasado, por el desarrollo y progreso de la provincia”.
Por ello, ha trasladado al PSOE la necesidad de acordar, en el marco de los primeros Presupuestos Generales del Estado y con vocación de mantener el apoyo durante la legislatura, el impulso de proyectos e inversiones “imprescindibles para que la provincia pueda seguir respondiendo a las previsiones de crecimiento poblacional, así como a las aspiraciones de desarrollo sostenible, progreso y calidad de vida que tienen no sólo las instituciones, agentes económicos y sociales sino el conjunto de los malagueños”.
