Se van tachando los días para que el Unicaja regrese a la competición después del miniparón por las fiestas navideñas. Los malagueños se pondrán al tajo este lunes con las pilas cargadas; a lo lejos ya asoma el UCAM Murcia, un equipo que la temporada pasada estuvo un escalón por encima de los malagueños. Esta temporada algo más decepcionante por las expectativas que había en verano: los de Sito son undécimos en la tabla, irreal por potencial, y víctima de cómo te engulle la Liga Endesa si hay despistes. Lo que no ha variado en los universitarios son las prestaciones de un Thad McFadden de nuevo excelso este curso. Camino de los 36 años, cada temporada parece dar otro saltito de nivel. Una pesadilla para la afición cajista por sus exhibiciones recientes en el Carpena.
Como pez en el agua en El Palacio, uno de los retos que tendrán por delante los verdes: frenar un jugador peligrosísimo si tiene feeling. La temporada pasada enmudeció a los allí presentes con un canastón prácticamente punteado por Alberto Díaz. No se podía defender mejor la acción sin hacer falta. Un tiro desde unos seis metros que entró limpio. 27 puntos hizo la criatura ese día (3/5 en tiros de dos y 6/10 en triples). Una derrota dolorosa por 87-88 porque supuso un paso atrás del Unicaja de aquel entonces por meterse en la pela por playoffs.
Más de lo mismo el año anterior con San Pablo Burgos. Su mejor partido de la temporada: 26 puntos, 9 asistencias y 33 de valoración. Él y Jasiel Rivero se lo pasaron pipa en el Carpena. McFadden fue elegido MVP del mes de marzo en 2021 por su exhibición en Málaga. Esta temporada vuelve a amenazar, aunque el Unicaja actual es bien distinto al de antaño. Solo sobreviven Alberto, Brizuela y Barreiro.
McFadden es un viejo anhelo del club de Los Guindos. Gustaba muchísimo a los altos dirigentes de la entidad e incluso se llegó a barajar su contratación en verano. Su capacidad de anotación, experiencia, liderazgo y con un rendimiento asegurado en Liga Endesa eran algunos de los motivos por los que aparecía en la lista de la dirección deportiva. Es un jugador, que por su perfil, habría tenido hueco en el Unicaja actual. Esta temporada es el segundo máximo anotador de UCAM Murcia (13,2 puntos), solo por detrás de Travis Trice (13,5). Viene de meter 21 tantos al Gran Canaria hace unos días.
Seguro que en la lista de tareas de Ibon Navarro y su cuerpo técnico aparece el neutralizar a este jugador. Alberto Díaz, estos días recuperándose de su tobillo, tendrá una ardua tarea. Viene el coco McFadden, pero también un deseo.
