Barreiro poco a poco se va pareciendo al jugador del Casademont Zaragoza. El gallego ha sido uno de los grandes beneficiados desde la llegada de Ibon Navarro, jugando como ‘3’, su posición más natural, y un estilo de baloncesto que cala con el perfil de Jony. Cuestionado esta temporada por no dar el nivel que se esperaba, bien el contexto tampoco ayuda, pero ya vamos viendo síntomas de lo que puede llegar a ser este jugador en el Unicaja. La apuesta del pasado verano fue grande.
El alero jugó ayer en Santiago dieciocho minutos. Fundamental en la gran salida del Unicaja al partido, sobre todo en defensa, y haciendo un trabajo oscuro en su tiempo en pista. Un +24 con él sobre el parqué, una de las estadísticas más importantes en los entrenadores. No es casualidad. «Es un jugador que por su intensidad es un tres físicamente muy poderoso. Hoy con él tenemos un más/menos tremendo atrás, sin anotar. Si entiende esto, va a pasar al siguiente nivel«, afirmaba Ibon Navarro en sala de prensa.
Es el tercer mejor jugador de la plantilla en estos registros, solo por detrás de Brizuela (+59) y Nzosa (+46). Barreiro suma un global de +42 en Liga Endesa, unos números que avalan el gran trabajo del internacional. Todos son buenas noticias después del triunfo cajista en el Fontes do Sar, necesario para calmar las aguas y afrontar la parte final de curso con optimismo. El descenso se aleja, y las dudas algo se disipan. Al Unicaja le toca demostrar que solo tiene una cara: la que vimos ayer ante los de Moncho Fernández.
