Kendrick Perry es un líder en el vestuario del Unicaja de Ibon Navarro. Un jugador al que todos respetan y cuya jerarquía ha ascendido fuera y dentro del campo de forma visible durante sus temporadas en la capital de la Costa del Sol. Suma cuatro títulos con el equipo malagueño desde que llegó y sabe que el objetivo que sólo falta por alcanzar es la Liga Endesa. Reconoce que el equipo no atraviesa el mejor momento de juego, pero sabe que está en una muy buena situación en BCL y ACB. Quiere dar un paso más adelante en 2025. Así lo ha reconocido en una entrevista a La Voz de Galicia en la previa del duelo entre Unicaja y Río Breogán del pasado sábado en el Carpena. Esta es la ‘Perry Mentality‘ de cara al Unicaja de 2025.
Por su parte, Perry ha hecho una comparación sobre el acoplamiento de las nuevas piezas en esta temporada con respecto al curso pasado. Obviamente, la gran diferencia radica en la cantidad de nuevos fichajes. De tener que encajar sólo a uno, a tener que hacerlo con tres. “Hemos añadido a Tyson Pérez, Olek y Tillie. No ha sido difícil porque son buenos chicos y se han aclimatado bien. La temporada pasada solo tuvimos que hacerlo con Kam Taylor. Solo era un jugador. Ahora han sido tres. Fue un poco diferente para nosotros. Lo importante es que los nuevos entiendan quiénes somos y lo que hemos logrado estas dos temporadas anteriores”, asegura Perry sobre la adaptación de los fichajes de este verano.
El internacional por Montenegro también asume la responsabilidad de ser uno de los jugadores que eleva el listón de este Unicaja. De hecho, asume que es uno de los líderes del vestuario. “Mi trabajo como uno de los líderes de este equipo es simplemente asegurarme de que sigamos teniendo la mentalidad y el hambre para intentar alcanzar estos objetivos y no volvernos complacientes y estancados con el éxito que hemos tenido hasta ahora”, asume con personalidad el propio Perry.
Otra cuestión que ha salido a la palestra en la entrevista es la de las semifinales y el jugador ha sido bastante franco sobre lo que se debe mejorar. «Es solo una cuestión de mentalidad. Nos quedamos cortos el año pasado. No solo debemos merecerlo, sino conseguirlo. No podemos esperar mejores resultados haciendo las mismas cosas que hemos estado haciendo, tenemos que dar un paso adelante cada uno individualmente. Debemos mejorar nuestras ambiciones, elevar nuestro nivel».
Además, no ha olvidado al jefazo. El hombre en el que se apoyan los jugadores y sobre el que se ha creado el corazón del vestuario cajista. Una buena mentalidad siempre va acompañada de alguien que te permita explotar tu calidad. Esto es lo que opina Perry sobre Ibon Navarro: «Es genial. Es de esos entrenadores que saca el máximo provecho de los jugadores. Los jugadores le respetamos. Saca lo mejor de ti, pero al mismo tiempo te exige mucho. Eso sí, te da la confianza para que puedas ser tú mismo en la cancha y eso es lo más importante que ha hecho por mí durante estos años juntos. Yo coloco a Ibon entre los entrenadores más brillantes, con la mentalidad más brillante y más reputados de España y de Europa», reconoce el base.
De esta forma, uno de los pesos pesados de uno de los combinados de moda, demuestra día a día el talento y la cabeza de hierro que maneja. Protagonista en este Unicaja histórico, la ‘Perry Mentality‘, no se esfuma de cara al Unicaja de 2025.