Se percibe ya cierta tensión en la pretemporada del Unicaja, atípica en comparación con cualquier otro verano. Que se lo digan a Juanma Rodríguez; muy activo en la banda del Arguelles ante el Real Madrid, como anoche ante el Zalgiris. El conjunto malagueño dejó algún ápice de mejoría en el Costa del Sol, dos derrotas ante un par de transatlánticos del viejo continente, algo que puede entrar en el guion, pero aún lejos de ver una ver una versión convincente. No saltan las alarmas, pero urge ganar partidos, teniendo en el horizonte la fase previa de BCL a la vuelta de la esquina.
El director deportivo tomó nota en este segundo ‘round’ de amistosos del verano. Rodríguez se mostró cercano con todos los jugadores, haciendo el papel incluso de Ibon Navarro cuando alguno que se acercaba a su posición. El arquitecto de la nueva plantilla no dudó tampoco en protestar alguna decisión de Benjamín Jiménez, árbitro ante los lituanos, con una vehemencia que refleja la necesidad de acumular sensaciones en esta doble cita en Antequera. En la última falta en ataque pitada a Ejim, polémica cuanto menos, el mandatario cajista dejaba una imagen elocuente: manos en la cabeza, mientras se levantaba de su silla sin dar crédito a la supuesta infracción.
También López Nieto estuvo cerca de la plantilla. En Los Guindos saben que es muy importante crear un ecosistema favorable desde bien pronto. «Existe una muy buena mentalidad de todo, con mucha gente demandando trabajo individual para progresar. Hemos sido el primer equipo en ponernos a trabajar y eso nos va a ayudar. Tenemos que conjuntar a muchos nuevos, no es sencillo. Por cómo venimos trabajando estamos contentos. Los resultados son lo menos importante, aunque nos gusta ganar siempre», decía Juanma Rodríguez hace unos días.
El Unicaja empezará a preparar la Copa de Andalucía con Perry y Lima. Ambos se ejercitarán en las próximas horas con los verdes, y se espera que puedan debutar en la Línea de la Concepción, tal y como confirmó anoche Ibon Navarro.