El técnico cajista ha comparecido ante los medios en la previa del duelo que enfrentará a los malagueños contra el Morabanc Andorra el próximo domingo a las 17:00 horas. El preparador habla sobre el estado del equipo, dudas de cara al choque como la de Kravish, la alteración que ha ocasionado la DANA en la planificación y la mentalidad de campeón que comienza a implantsarse en el equipo. Ibon Navarro y la mentalidad de campeón: «A veces perdemos la noción del aquí y el ahora».
¿Oportunidad para la reivindicación? “Después de 15 victorias y una derrota, parece que estemos todavía acordándonos de la derrota. Es bueno. Tenéis las expectativas muy ajustadas. Morabanc Andorra con las lesiones pierden potencial deportivo, pero les permite afrontar el partido desde un estado mental mucho menos tenso. Conozco bien la Bombonera y sé cómo se afrontan este tipo de partidos. Habrá muchos jugadores que den un paso adelante y que jueguen sin presión. Estamos hablando de un equipo que tiene mucho talento. Estamos hablando de Jerrick Harding, Stan Okoye, el propio Chougkaz, que ha tenido algunos partidos de nivel muy alto, la vuelta de Shannon Evans, Kyle Kuric… Cometeríamos un error si pensáramos que no tienen opciones por las lesiones. Evidentemente Rafa Luz y Ferran Bassas son dos jugadores muy importantes. Para su estilo de juego son particularmente importantes. Destacar la ausencia de Ben Lammers. Es el equipo que tiene más tapones en liga gracias, en gran parte, a él. Les condiciona, pero a mí lo que me toca es hacer ver la parte mala para nosotros de todo esto. Primer partido en el que falta Lammers, todo el mundo querrá dar un paso adelante y eso es lo que tenemos que intentar controlar”.
Dudas. “Tenemos duda con David Kravish, que ayer tuvo algún problema con la espalda. Va a entrenar, no sé si todo. Ha entrenado bien. Me gustaría que estuviese el domingo. Si no está bien, tiene compañeros que le suplen”.
Alteración de la planificación por la DANA. “Con las incomodidades que no podemos controlar pero bien. Se cambió un día libre de la semana y ha modificado el tipo de entrenamiento de hoy y mañana. No hubiéramos hecho el lunes lo que hicimos, pero eso no es lo importante, lo importante es que la gente esté bien y que la ciudad vuelva a la normalidad. Si hubiéramos tenido el planning inicial sin DANA, hubiera sido de cargar, recuperar sensaciones y meter un par de cosas que queríamos hacer y que no encontrábamos el momento. Con esto, hemos cambiado un poco. Hoy y mañana serán, felizmente para los jugadores, muy cortos. Para mí, no. Iremos introduciendo cosas y desarrollando a medio plazo. Intentar recuperar alguna característica del equipo del año pasado que estamos perdiendo, sobre todo a nivel defensivo”.
Complicación de las desconvocatorias. “No cabe duda. Es uno de los problemas de los entrenadores. Sabemos que los dos jugadores que se quedan fuera aportarían al equipo seguro. Nos toca tomar esa decisión en función de lo que vemos en la cancha y en los rivales. Principalmente esto último. No hay nadie que no trabaje al ritmo de sus compañeros. Es más cuestión de sensaciones, gestión de grupo y virtudes de los rivales. Me gustaría que estuviera David Kravish el domingo, pero si no está, estará otro que podrá aportar lo que aporta él y que el equipo se adapte a la forma de jugar”.
Consecuencia de la ventana FIBA. “Otros años ha afectado bien. Este, no lo sé. Se van muchos jugadores y nos quedamos un grupo muy reducido. Los entrenamientos no serán de mucha calidad a nivel colectivo. Lo más importante es que vuelvan bien y sin lesiones. Lo demás me importa poco. Tendremos tres o cuatro días para reconectar con las cosas del equipo. Ahora cada uno se va con su padre y con su madre. Tendremos ahí tres o cuatro días para afrontar un partido que tenemos a la vuelta que es super exigente. Tendremos dos semanas para eso”.
Adaptación de los nuevos y evolución del equipo. “Lo más importante es no tener las miras ni muy cortas ni muy largas. Estamos en un proceso de crecer. Seguimos teniendo tres jugadores que no llevan con nosotros ni dos meses en cuanto a entrenamientos de crecer como equipo se refiere. Tuvimos una pretemporada muy rara. Siguen siendo tres jugadores que tenemos que meter. Son importantes, nos aportan muchas cosas y no somos capaces de encontrarles bien. Tenemos que hacer un ejercicio de abrir las miras. Hay un bloque de diez u once jugadores en los que confiamos mucho, pero también hay que confiar en los tres nuevos. Sigue siendo importante que les saquemos el máximo. Ese es el objetivo del equipo, más allá de los resultados. Tenemos que enfocarnos en el día a día y en encontrar esas cosas. Crecer de esa manera. Cuando vayamos a los partidos, que intentemos hacer las cosas bien. Sabemos que las estamos haciendo. Vamos a ser competitivos. Cuando lo somos, tenemos muchas opciones de ganar. Más allá de ganar el partido y la siguiente semana, mantener el primer puesto… Ya sabemos que el primer puesto, desgraciadamente, no te da nada. Entonces, si no conseguimos crecer para que cuando lleguen los momentos en los que no podamos hacer las cosas que nos gustan y que hacemos bien, y encontremos la manera de poder seguir siendo competitivos de otra forma, no estaremos siendo inteligentes. Esa es la manera de prepararnos para cuando no podamos hacer las cosas que nos gustan y que sabemos hacer bien”.
Mentalidad de campeón. “Va un poco en la línea que os comentaba del estudiante listo y vaguete. El equipo es muy bueno y no es vago, pero tiene esa capacidad y mentalidad, a veces, de estar pensando en el momento en el que nos vamos a jugar cosas. A veces perdemos la noción del aquí y el ahora. Pensamos que lo vamos a sacar porque somos muy buenos, pero los equipos nos van conociendo y haciendo trampas. Nos tenemos que preparar para eso. La mentalidad del equipo ha cambiado porque somos capaces de ganar sin hacer un partido redondo. Tenemos calidad, experiencia, los jugadores se conocen bien, tenemos muchos automatismos… Hay días en los que eso no es suficiente o no te salen bien las cosas. Se trata de que seamos conscientes que más allá de ir a salir a ganar un partido, tenemos que intentar salir a hacer las cosas bien y mejorar como equipo de cara a mañana. Ahí es cuando el equipo se jugará cosas. No ahora. Será en febrero, mayo, junio si Dios quiere”.
¿Te gusta que los jugadores se sientan campeones? “Lo conozco. Sé que piensan así. No me sorprende y me parece bien siempre que seamos consecuentes. Si nos sentimos así y eso es verdad, tenemos que seguir siendo consecuentes y trabajando. Eso implica una responsabilidad. Por eso, no pueden pasar cosas como las de Manresa. Creo que nos hemos ganado el derecho y el privilegio de sentirnos así. Tenemos que trabajar cada día para que el día que las cosas no salgan bien, encontremos la manera de poder competir y opciones de ganar. No me molesta porque creo que es verdad. No sé cuantas jornadas seguidas desde el año pasado a este llevamos siendo primeros. Eso no es una casualidad. No me importa si todos asumimos que conlleva una responsabilidad”.
Exceso de minutos en determinados jugadores. “Exclusivamente condicionado por las bajas en el exterior. Algún descanso que hemos tenido que dar que quizás no era lo ideal. El otro día lo de Djedovic. También fue por una cuestión estructural del Joventut dejar aquí a Melvin Ejim, nuestro único interior que puede jugar por fuera. La baja de Alberto Díaz lo condiciona todo. Se han preparado a los jugadores para aguantar esos minutos extras porque vienen las ventanas. Ahí vamos a poder recuperar el tono. Puede ser que en los últimos partidos de BCL estemos clasificados como primeros y que ahí podamos hacer una rotación algo anormal para dar descanso a los jugadores que estas últimas jornadas han jugado por encima de los 20 o 21 minutos. Pueden pasar estas cosas pero están dentro de una planificación”.