El Costa del Sol Málaga estará en abril en la fase final de la Copa de la Reina que albergará San Sebastián. La séptima presencia en los ocho temporadas de las panteras en la Liga Guerreras Iberdrola, lo que habla del crecimiento y la ambición del equipo malagueño. Se impuso en la vuelta de la segunda ronda en Ciudad Jardín al Zubileta Evolution Zuazo Barakaldo (26-25) en un partido donde tuvo que picar piedra. Las de Suso Gallardo continúan la dinámica ganadora y siguen invictas en 2022 antes de afrontar un mes de enero que sube otro peldaño el listón de la exigencia.
El Zuazo salió a morder para intentar agotar las balas que mereció en Lasesarre y dominaba los primeros compases. Virginia Fernández, que paraba varios siete metros, sostenía al Costa del Sol Málaga. Sara Bravo ofrecía goles, con gran rendimiento como lateral, y había igualdad en el marcador (4-4, 5-5, 6-6). Sobrevivían las malagueñas, que sabían esperar su momento para dar el primer mordisco. Con Talita Alves a la cabeza, ya repuesta de unos problemas físicos que le lastraron tras el Mundial, abría la primera brecha (12-9). La brasileña producía desde la larga distancia y daba nuevos recursos al ataque local.
Las de Suso Gallardo aprovechaban las vías de agua en la defensa vasca y ponían la máxima por medio de Espe López (14-). Pero las visitantes comprimían al paso por el descanso (14-11). Las panteras se manejaban cómodas con rentas superiores a los dos goles y los minutos pasaban, lo que era un gran aval. Con Estela Doiro en la dirección volvían a gobernar en el parqué e Isa Medeiros era ahora la que estiraba hasta el 21-16. Gozaban de minutos Carla Barranco, Desi Segado y Daniela Jerónimo, del Antequera Costa del Sol. No bajó los brazos el Zuazo, que siguió peleando y consiguió meterse en el duelo. Con el 23-23 apareció Doiro, que con dos goles sentenció el partido y el pase a la fase final de la Copa de la Reina. El Costa del Sol Málaga volverá a pelear por levantar el título copero en San Sebastián.