Ya era hora. Por fin se acabó la liga regular que tantos altibajos nos ha deparado. ¡Qué largo se nos ha hecho!, y todo como consecuencia de la mala imagen y peor juego de un equipo que ha generado demasiadas dudas pero que, a pesar de ello, jugará por volver a Segunda división.
Finalmente, este Málaga ha conseguido lo menos malo a lo que podía aspirar. El equipo dijo adiós hace tiempo a la primera posición y con ello al ascenso directo, y al segundo puesto que otorga mayores ventajas dentro de lo que representa afrontar la lotería de los ‘play off’. Bien estará lo que bien acabe, Toda teoría y normas que favorecen a los mejor clasificados hay que hacerlas buenas en el terreno de juego que ya sabemos de situaciones de equipos favoritos y con todo a favor a priori, que se han visto sorprendidos y hundidos en la miseria. No hago las cuentas a tenor del cuadro que le ha correspondido al Málaga, solo pienso en que hay que ganar cuatro partidos para ascender, porque los ocho equipos que llegan a estas eliminatorias partirán con el mismo objetivo: subir y abandonar esta maldita categoría.
Pese a que el Málaga ha logrado ganar los dos últimos partidos de liga, para mí el juego no resulta alentador ni convincente. No es algo nuevo, pero es lo que tenemos y, pese a las carencias de este equipo, hay que explotar las virtudes al máximo. Un portero que sigue siendo un seguro de vida; un sistema defensivo que, pese a no pocas imprecisiones, provoca que el contrario te marque pocos goles; y la esperanza final que pasa por aprovechar las escasas oportunidades de peligro que genera con el mejor Roberto o el Ferreiro inspirado que vimos frente al Castilla.
Tenemos que olvidar lo ocurrido hasta ahora y estar ‘Unidos Por un Mismo Fin’. Resetear como se dice en el mundo de la informática, para empezar con la mente despejada y con el mejor espíritu para empezar la hora de la verdad en Vigo. Voy a buscar datos objetivos que sirvan para fomentar el optimismo, y sin tener que rebuscar con profundidad. Para mí, la esperanza para ascender se basa en que el Málaga de Pellicer es un equipo de resultados cortos (0-0, 1-0, 0-1) y a ello me encomiendo.
No quiero acabar este Con Rigor sin hacer mención a lo vivido el viernes pasado en La Rosaleda. El partido de las Glorias malaguistas frente al combinado de la AFE donde también jugaron unos cuantos ex blanquiazules. ¡Cuántas emociones, recuerdos y sentimientos! ¡Qué orgullo de ver a tanto ilustre que ha defendido la camiseta malaguista!, la pena por los que no pudieron estar en la cita o, desgraciadamente, han fallecido. Me resultó muy emotivo el recuerdo de los seis porteros que jugaron entre los dos equipos para con mi apreciado y añorado Arnau; o cuando se mencionaron por la megafonía los nombres de Benítez y de mi ídolo desde la infancia D. Sebastián Humberto Viberti Irazoqui. Nuestro Málaga, esta unión de pasado y presente bajo las distintas nomenclaturas, tiene una historia forjada con el paso de los años entre la que se encuentran capítulos que recogen la calamidad de unos gestores que nos han llevado al túnel de la Primera RFEF. Lo del pasado viernes sirvió para recargar las pilas de los malaguistas más veteranos, y una lección para las nuevas generaciones que no llegaron a ver a tanto ilustre y ahora pueden tener una noción de lo que fuimos para dar un paso hacia lo que queremos ser.
PD: Yo también coreé el ¡Willy quédate!, cómo no hacerlo después del recital que dio bajo los palos. Ojalá pudiéramos hacerle la ficha para que jugase las eliminatorias de ascenso y Alfonso Herrero de delantero. Los sueños, sueños son…
José Manuel Velasco
Redactor Onda Cero Málaga
El Málaga como muchos púgiles no puede ir a vigo a un intercambio de golpes porque saldría mal parado, el celta B ha hecho 64 goles, ve puerta con más facilidad que muchos equipos.
Siguiendo con el símil boxístico y aunque a muchos no les guste, creo que habrá que ir a Balaídos a agazaparse, al esquive y bloqueo de golpes y esperar algún error del celta B. Si vamos al intercambio de golpes, a este equipo le cuesta ver puerta y nos puede pasar como con el Almería B.
Pienso exactamente lo mismo, el Celta B, lleva toda la temporada con el mismo esquema, y casi los mismo jugadores, todos entienden y saben su ROL, con las ideas bien claras, además de tener un centro del campo conjuntado y con empaque, rápido y solvente con el balón, dos bandas extremadamente rápidas y desequilibrantes, que generan mucha superioridad, delanteros móviles todo lo contrario que nuestra defensa, lenta, muy lenta sobre todo a la espalda, la defensa es un lunar del Celta B, pero nosotros en ataque no somos nada n i jugamos a nada así que mas vale defender y bajar al barro …