El partido del Sanluqueño me ha dejado mal sabor de boca. Volver a ver al Málaga sin ideas y maniatado por un equipo de peor calidad es algo a lo que no me puedo acostumbrar. Además, la derrota del Castellón me enfadó todavía más. De haber ganado la distancia sería de 6 puntos y con un Castellón – Córdoba a la vuelta de la esquina. Nos podíamos ver a tres puntos en un visto y no visto cuando hasta hace nada estábamos a trece. Pero no pudo ser y este Málaga perdió una oportunidad de oro de demostrar que se puede ir a ser campeón todavía. Sinceramente creo que viendo el bajón de nuestros rivales este Málaga CF está a tiempo de todo y también de nada.
El choque en El Palmar dejó a las claras que el banquillo del Málaga tiene que dar un paso. Un paso al frente concretamente. No puede ser que de cuatro cambios, solo un jugador mejorase notablemente al que había salido del terreno de juego. No excuso a Pellicer, que creo que estuvo poco fino en su plan B, pero jugadores como Larrubia, Juan Hernández, Avilés y compañía tiene que comerse el mundo para jugar en este equipo. Me faltó eso. También que el equipo saliese al campo de Sanlúcar a comerse el mundo sabiendo que el Ibiza había pinchado.
Lo siento, pero no me gustó lo que vi. Y me jode porque después de estos últimos tres partidos se había visto algo más que victorias. Se había visto una idea de juego y un equipo que sabía llevar el partido a su terreno, con altibajos como cualquier hijo de vecino. Este Málaga CF está a tiempo de todo, incluso de ser campeón. Pero para ello, el banquillo malaguista debe dar un paso adelante. A ver si las recuperaciones de Roberto y Manu Molina traen de vuelta al Málaga del último mes y entierran el de las dudas.
Lo que es penoso también es que el director deportivo sabiendo lo que necesitaba el equipo dejara pasar la oportunidad del mercado de invierno y haber reforzado el equipo de verdad, ahora está todavia mas claro que si se hubiese hecho así seriamos claros candidatos al ascenso directo, y no depender como dependemos ahora de un par de jugadores.
Entre la poca calidad de algunos jugadores y las pocas ganas de correr que tienen otros, la cuestion es que este año no subimos, hay que darle un giro de 180 grados a este Malaga para que el año que viene podamos subir sin problemas, y esto es lo que hay.