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Una huella imborrable por el ascenso

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Foto: Javier Díaz

Una huella imborrable por el ascenso. Ese es el pensamiento que ha tenido Dani Sánchez después de que el Málaga CF hiciera historia en Tarragona. El lateral izquierdo del conjunto blanquiazul ha sido uno de los claros ejemplos de la comunión que ha existido dentro del vestuario. Víctor García le ganó la batalla por completo, pero él animó como el que más y empujó al máximo. Es tal su compromiso y su sentimiento de pertenencia a este club y a este vestuario que ha decidido tatuarse el número 122 en su mano izquierda. Minuto en el que Antoñito Cordero conseguía el gol del ascenso ante el Nástic de Tarragona. De este modo, una huella imborrable por el ascenso.

Dani Sánchez ha sido pegamento en el vestuario. En cuanto a su rendimiento individual durante la temporada ha ido de más a menos. Durante la primera vuelta del campeonato era muy habitual verle en los esquemas de Sergio Pellicer. Llegó a acumular 14 titularidades consecutivas en Liga entre los partidos frente al Recreativo de Huelva en el Colombino y la derrota en el Álvarez Claro de Melilla. Un tropiezo que le supuso un punto de inflexión en los planes de Pellicer.

A partir de ahí, la cantidad de minutos bajó considerablemente. Ya sólo fue titular en las visitas gaditanas a Algeciras y San Fernando. En ninguna de ellas consiguió completar los 90 minutos. Algo que sí hizo en el último encuentro de la fase regular frente al Real Madrid Castilla en un duelo donde el Málaga CF consiguió arrebatar la tercera posición a la UD Ibiza. En gran parte, su titularidad y su disputa completa del partido se justificó en que Víctor García estaba apercibido de sanción. Si Víctor hubiera visto amarilla en Valdebebas, se habría perdido el primer partido de la eliminatoria de semifinales del playoff.

Independientemente de que su rendimiento bajó en el tramo final de temporada, la figura de Dani Sánchez no se puede cuestionar. Jugador de equipo. De hacer piña. Aportando lo que debe en cada momento. Sintiendo como el que más. Algo que demuestra tanto dentro como fuera. Su último detalle, una huella imborrable por el ascenso. El tatuaje en su mano izquierda del número 122 en homenaje al minuto del gol de Antoñito Cordero. Algo que hizo público a través de una storie en su cuenta de Instagram.

4 COMENTARIOS

  1. 122, si ves nuevamente la transmisión la tv puso el tiempo añadido cuando el 4 árbitro aún no había sacado tablilla. Cuando finalizan esos dos minutos, y se venen la transmisión, es cuando el 4 árbitro levanta la tablilla con los dos de ampliación. Lo dicho, ante la duda, sobre todo con los del Nastic, la duda viene por un error de la tv, pues hasta que no levanto el 4 arbitro la tablilla era aún tiempo reglamentario y no de prolongación, y por lo tanto el gol fue en el 122. Disculpad si me he enrrollado mucho, es que aún estoy por las nubes.😅😅

  2. Si para vosotros los del Nástic fue en el 145 😂😂😂😂,,donde están los balones,los balones donde están,,,haceros un wasapp de grupo hacezme caso os vais a desahogar mucho mejor en familia.

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