Con 14 jornadas ya disputadas, una de la tres partes del campeonato ya ha tocado a su fin. El Málaga CF posee unos registros que lo colocan en 9ª posición, y a tan solo dos puntos de los puestos de playoffs. No obstante, un primer tercio de aprobado raspado es lo que ha conseguido el equipo de José Alberto, que tiene asignaturas pendientes.
Un baluarte en Martiricos
Poca concesión y mucha solidez. Así ha sido la cara del Málaga CF en lo que va de campeonato en su hogar, y se sitúa como el 2º mejor local de Segunda -por detrás de Las Palmas-. Tirando de estadísticas, se ve reflejado el trabajo que los blanquiazules realizan en casa. Se han obtenido 17 de los 21 puntos posibles. Esto se traduce en un balance en el feudo de Martiricos que comprende 5 victorias, 2 empates y ninguna derrota.
Los de José Alberto han concedido muy poco en casa, y de momento siguen manteniendo La Rosaleda como un templo inexpugnable por sus rivales. De hecho, en cuanto a los goles, no han llegado en gran cantidad pero sí que hay un saldo positivo. Se han concedido 2 goles en contra -el del Zaragoza y el del Sanse- frente a los 8 anotados por los boquerones. Una diferencia de goles de +6 que otorga la ventaja suficiente para rendir en casa.
El vértigo de abandonar el hogar
La imagen del club de Martiricos cambia cuando se encuentra lejos de la Costa del Sol. No es en el apartado del juego donde se nota tanta diferencia, sino que es en los números donde quedan reflejados los debes que tiene este equipo, situado en la penúltima posición en cuanto a visitantes se refiere -solo el Alcorcón tiene peores cifras-.
En cuanto a los puntos obtenidos, nada que ver con lo que ocurre en casa. Solamente se han rascado 3 de 21 posibles, algo que penaliza sobremanera la clasificación del equipo. El balance es terrorífico. Ninguna victoria en el saldo blanquiazul, 3 empates y 4 derrotas. Datos de vértigo que asustan a cualquiera, y que este fin de semana tratarán de equilibrar con la primera victoria.
De este modo, la falta de eficacia queda aún más a la vista cuando el equipo juega extramuros. Los goles concedidos ascienden hasta los 13, una cifra nada permisible que condenan a los de José Alberto. Por otro lado, solamente se han anotado 5 tantos como visitantes, lo que supone un saldo de -8 en la diferencia de goles.
En general, un suficiente
En total, un saldo para el Málaga que luce con 20 de 41 puntos posibles; 13 goles a favor y 15 en contra; un saldo de diferencia de goles de -2; y un balance de 5 victorias, 5 empates y 4 derrotas.
Es lo malo de poseer dos caras. Ser el Dr. Jekyll y Mr. Hyde comparando la aventura como local y como visitante hasta el momento hace que la media de este primer tercio de temporada no alcance más que un aprobado raspado. Las miras malaguistas están puestas en la lucha por los puestos de ascenso y, aunque se tocan con la yema de los dedos, aún no se ha entrado de lleno. Una asignatura pendiente la de sumar de tres fuera que tendrá que aprobar para poder pasar de curso y buscar la matrícula de honor en una temporada que aún tiene que vivir sus dos terceras partes.
Tienen que entrar enchufados y activados a los partidos. No se puede empezar flojos a ver qué pasa ni encajar un gol a los 5 ó 10 minutos. Esto te condiciona todo el partido y llegan los nervios y las imprecisiones,la ansiedad…eso no es nada bueno. Hay que agotar los 5 cambios siempre para dar refresco al equipo y mantener la presión al rival.