Octubre ha llegado a su fin y en Villarreal siguen sin tener noticias del Al Shabab. El cuadro de Arabia Saudí está obligado a pagar 4 millones de euros y sus intereses al conjunto amarillo con motivo del traspaso de Alfred N’Diaye. La FIFA instó a primeros de este mes a que pagase esa cantidad antes de que transcurrieran los 45 días señalados. En el Málaga CF también esperan con ganas que llegue ese pago. Los blanquiazules cobrarán por el traspaso de Ontiveros, dos años después, en cuanto se produzca el cobro por parte del Villarreal. Una cantidad con la que el administrador judicial cuenta en sus informes.
El problema es que pese a la amenaza de la FIFA, el máximo organismo del fútbol mundial, el Al Shabab no se inmuta. La FIFA exige al equipo saudí que abone los cuatro millones que se les deben a los castellonenses. Tendrán que abonar un 5% por el retraso en el pago de los primeros 2 millones. Y también un 10% por el retraso en el pago de los otros dos. El Málaga también negocia con el Villarreal si los blanquiazules tendrán derecho a esos intereses de demora. Una cifra que ya no es tan necesaria en las oficinas de La Rosaleda, pero que es un derecho que el club andaluz piensa pelear.
Mientras, Ontiveros debe estar arrepentido de no haber venido a Málaga. En 11 jornadas de Liga, Ontiveros solo ha jugado 25 minutos con el Osasuna. El extremo marbellí no valdría ahora esos 7,5 millones de euros que el Villarreal pagó por él en el verano de 2019. Un traspaso obligatorio para un Málaga que estaba entre la espada y la pared tras la nefasta gestión de Caminero y su equipo de la dirección deportiva. El Al Shabab no contesta al Villarreal en el caso Ontiveros y la sanción para el cuadro de Arabia Saudí podría ser de hasta dos mercados de fichajes sin poder firmar.
Pues si la sancion va a ser dos años sin poder fichar que no cuenten villareal y malaga con el dinero
Es injusto que se le mencione solo a Caminero. Hay muchos responsables y suso dicho no es de mi agrado