Mucho ha cambiado la planificación veraniega del Málaga CF desde su descenso a la Segunda División. Atrás, muy atrás, quedan las pretemporadas fuera del país. La última vez que el equipo realizó un stage en el extranjero fue en julio de 2017 en tierras alemanas. Por entonces, los de Martiricos preparaban la que iba a ser la campaña del descenso.
Un año más tarde, el panorama cambió drásticamente. Aunque el Málaga CF tenía programado, incluso con partidos cerrados, otro verano en Alemania, Juan Ramón López Muñiz quiso centrarse en una concentración cerca de casa, además de su deseo porque los jugadores tomasen conciencia de la nueva realidad del club. Y tan nueva realidad.
En el segundo verano en la categoría de plata, el Málaga decidió centrar sus fuerzas en la provincia, concretamente en Benahavís. Allí se prepararon para una temporada que ha resultado ser la más complicada de la historia reciente del conjunto boquerón. Con los visibles problemas económicos, estaba claro que la próxima pretemporada también iba a ser en la provincia.
Este agosto, el Málaga tendrá su hogar en Alhaurín el Grande, donde estarán ubicados a partir del próximo día 10. El complejo en el que se hospedará la expedición cuenta con gimnasio además de dos campos de fútbol de césped natural, uno de ellos reglamentario, y otro de Fútbol-7. Hasta que no mejore la situación económica del club –refrendado con el ascenso- no habrá pretemporadas lejos del país.
