Pellicer demostró su cabreo con el balón parado y los fallos en defensa que tuvieron los blanquiazules. El técnico de Castellón quiso poner dos notas distintas a su plantilla. “Yo creo que más allá del análisis hay que poner un diez en concepto de actitud. El Mallorca es un equipo muy solido en defensa y tenemos que ponernos un cero a balón parado. A partir de ahí podemos hacer todo el análisis que queramos. Nos han faltado cosas pero lo del balón parado no ha estado bien. Un córner, una falta lateral… sabemos el potencial del Mallorca. Ellos están creciendo mucho y pienso que hemos jugado de cara a cara pero con esos fallos atrás…”, comentó el preparador.
No quiso señalar a nadie
El técnico malaguista continuó con su mensaje sobre el partido. “En la segunda parte lo hemos intentado con los cambios. Cuando estábamos otra vez intentando sacar el cuello nos ha llegado otro gol. El balón parado es el 40% de los goles y ahí hemos estado mal. Hemos luchado y creído pero no ha podido ser. Ellos tienen calidad y nos lo han hecho pagar caro”, afirmó un Pellicer que quiso huir de señalar a nadie. “El que ha fallado es el entrenador por no transmitir. Mejías ha hecho un gran partido, podría haber jugado él solo en defensa. No me gusta ser de los entrenadores que señalan. Prefiero ser de los que pegan los cristales en lugar de romperlos”.
“Ganamos y perdemos todos. Competir de manera individual para el bien del colectivo. Los jugadores lo han dado todo. Va a haber siempre goles a balón parado pero duele que algo que habíamos hablado con respeto al Mallorca, no salga. Los que no tenemos tanto poderío a balón parado tenemos que hacer más. No me quiero excusar en eso. Nos hemos ido al descanso con un 1-0 y con algo de falta de atacar los espacios y finalizar jugadas. En la segunda parte se ha visto un equipo que ha querido jugar. El Mallorca defiende bien y eso es lo positivo, que les hemos marcado un gol y apretado un poco. En nuestro mejor momento ha llegado el 3-1”, proseguía el de Nules.
Pellicer vio a un vestuario cabreado con el balón parado
Pellicer habló también de los cambios. “Había que cambiar a alguien por el esquema. Lo he dicho al descanso. Había que arriesgar quitando un central para meter a Jozabed. Queríamos ganar en el pase y en el juego entre líneas. Antes del 2-0 el equipo estaba bien. Creo que la actitud tiene que ser de 10. Ahora veré el partido repetido y podré analizarlo mejor. Hay muchas cosas que mejorar, pero teníamos a un grandísimo rival en frente”, explicó.
El entrenador blanquiazul hizo una fotografía del vestuario malaguista. “El estado de rabia es muy bueno. El grupo tiene hambre y que hoy haya perdido con un Mallorca y haya cabreo es bueno. Estamos generando ilusión y eso cuando no se cumple, duele. Hay que pensar que tenemos 14 puntos y que hemos competido. El vestuario estaba cabreado y es porque hay mucha ilusión en ellos. Quieren agradar a la afición, una afición que creo que le gusta la actitud que tiene esta plantilla. El autoestima hay que controlarla. Tenemos que buscar un equilibrio entre la ilusión y la desilusión. Estoy enfadado, repito, con el balón parado», repitió Pellicer.
