Habrá que ir con precaución a partir de ahora por La Rosaleda, porque hoy se activó por primera vez el peligro pantera en el Anexo. Sekou Gassama es el nuevo flamante delantero del Málaga y, nada más hacerse oficial su fichaje, se armó las botas para llevar a cabo su sesión inaugural a las órdenes del cuerpo técnico de José Alberto sobre el verde adjunto al templo de Martiricos.
En plena resaca futbolística tras vencer al Alcorcón, los efectivos blanquiazules que formaron el once inicial realizaron labores específicas de recuperación en el gimnasio. Con el senegalés acaparando los focos junto a sus nuevos compañeros, la otra novedad estuvo en la portería con el filial Carlos López, que se unió a la dinámica del primer equipo. Málaga se convierte en la selva, porque hay peligro por pantera de aquí a final de temporada -si es que Manolo Gaspar no reacciona al respecto, puesto que la entidad se guarda una opción de compra-. La Cueva sigue tirando de genio.
