El Málaga CF recibirá finalmente los 40 millones de LaLiga Impulso. El acuerdo de CVC fue ratificado y eso abre ahora un nuevo e interesante camino a los blanquiazules. Como ya adelantó Radio MARCA Málaga en junio, la idea de la dirección deportiva blanquiazul siempre fue la de poner toda la carne en el asador por un delantero. Muchos fueron los consultados por Manolo Gaspar. Pero la falta de liquidez y de límite salarial, algo que no se ha resuelto hasta este jueves, provocó que los blanquiazules no se metieran en muchas de las operaciones. Desde Blanco Leschuk hasta Borja Garcés. Si el Málaga hubiese tenido dinero, Manolo Gaspar hubiese traído el postre hace tiempo.
Ahora, con poco más de quince días por delante, el Málaga se prepara para rematar una plantilla a la que claramente le falta mucho gol. Lo admitía el propio director deportivo en su comparecencia por la presentación de Peybernes. “Con la foto actual del equipo queda claro que necesitamos reforzar la parte de arriba, meter un poquito de pólvora. Estamos trabajando para eso, quedan días de mercado por delante. Los planes blanquiazules siguen pasando por firmar dos atacantes. En las oficinas de La Rosaleda hay una mezcla de prisas y pausas.
Por un lado, todo el mundo es consciente de que cuanto antes se efectúe el fichaje de un delantero, antes puede arreglarse el problema de la falta de puntería. Por otro, el fútbol español va a vivir un final de mercado con muchos movimientos, algunos de ellos inesperados y a la desesperada. Ahí, un Málaga con dos millones de euros más de límite salarial puede moverse a la perfección. Manolo Gaspar prepara el postre. Un postre con sabor a gol. Mientras se espera a Antoñín, depende un poco del Granada, se suspira por un goleador que saque al equipo de sus problemas ofensivos que ya se atisban.
Si Antoñín es el postre elegido, mal anda la cosa.