El 31 de julio era la fecha clave para saber si el Málaga había cumplido con las condiciones económicas de LaLiga y podía ser inscrito en categoría profesional para la temporada 20/21. Para ello, lógicamente, también tenía que haber conseguido, al menos, la permanencia en Segunda sobre el césped. Pero después no había más días de prórroga.
Su tope salarial tenía que estar ajustado sin haber acabado el mercado de fichajes para ese tiempo. Si el de la actual campaña ya superaba con creces lo permitido por la competición, en la siguiente aún bajará más. Será el mínimo, si bien podrá aumentarlo en un 30%. Es decir, que podría ascender a poco más de 6 millones de euros. Ni un céntimo más so pena de ser descendido administrativamente.
Además, teniendo en cuenta el expediente sancionador que LaLiga ya decidió hace meses, el club no podrá inscribir nuevos jugadores. Y si le dejan siempre será por el salario mínimo hasta un máximo de 18 futbolistas profesionales.
LALIGA REBAJARÁ SUS PRETENSIONES
No es que todo haya cambiado y ahora todo el monte sea orégano. Pero las actuales circunstancias y la pérdida de ingresos en el fútbol ha calado en el organismo presidido por Javier Tebas.
Por lo pronto, ese 31 de julio no va a ser ya la fecha clave para el Málaga. La inscripción de los clubes tanto en Primera como en Segunda se retrasará sine die. En cuanto a los topes salariales, se da por hecho en las oficinas de la entidad malacitana que Tebas y compañía reducirán la presión de los topes salariales. No habrá tiempo material para corregir los desfases tan graves como los que sufre el Málaga.
Hay que recordar que el administrador judicial, José María Muñoz, informó a la jueza de que ese desfase entre lo que se espera de tope salarial y los compromisos futuros es de unos 15 millones de euros. Con el panorama del verano, donde se espera que no haya traspasos millonarios, imposible recuperar esa diferencia.
AMPLIACIÓN DE CAPITAL Y TRASPASOS
Ni siquiera con la posible ampliación de capital que pretende BlueBay en cuanto su sentencia sea firme y no provisional como ahora sería posible.
En todo caso, aunque no cumpla con todo, el Málaga está obligado a generar ingresos para intentar que LaLiga vea que intenta cumplir con sus condiciones económicas. Y estos, es obvio, pasarán por desprenderse de los más altos salarios sin que suponga un coste en forma de rescisiones, y en aceptar traspasos prácticamente por cualquier jugador y en cuanto lleguen las ofertas.
donde esta el dinero de la academia ?