Los ‘mileuristas’ de Pellicer

El técnico de Nules se ha acordado de su cuerpo técnico y lo ha reivindicado. Los ‘mileuristas’ de Pellicer.

Cuando Sergio Pellicer ‘agarra’ el micrófono en rueda de prensa, hay que abrir las orejas y analizar sus palabras porque siempre hay un mensaje. Hoy, en la previa del duelo ante el Recreativo Granada, no ha mandado un mensaje encriptado ni oculto, ha sido bastante claro. Ha sido preguntado por el nuevo fichaje que ha incorporado en el cuerpo técnico Juan Francisco Roldán. El guatemalteco aterriza en Martiricos para encargarse del análisis y liberar un poco de sus múltiples responsabilidades a los demás miembros del equipo de Pellicer.

Esto opinaba sobre él el técnico: «Es un chico que trabajó conmigo en el Deportivo de la Coruña. Se han dado muchos astros. No vino por la situación económica antes. Se dio la situación personal de que venía a vivir aquí y nos va a ayudar muchísimo. Va a ser analista de nuestro propio equipo, no tanto del rival. Es un profesional y un buen tipo».

Además de transmitir esas buenas sensaciones acordes al nuevo analista, también ha querido reivindicar a sus compañeros, aquellos con los que convive en el día a día. Lo hacía de forma decisiva y tajante entrando incluso en los aspectos económicos y la retribución que estos trabajadores reciben: «Somos el cuerpo técnico más eficiente de muchísimos años. Tengo mileuristas como muchísimos de vosotros en el cuerpo técnico. Que la gente lo sepa. Es un cuerpo técnico que echa muchas horas y somos unos privilegiados».

Tras el devastador paso del ERE y sus consecuencias en las oficinas de Martiricos durante el verano pasado, el cuerpo técnico de Pellicer se vio reducido hasta sus mínimos. Hoy en día se podrían considerar como pluriempleados a aquellos ‘currantes’ que deben lidiar con responsabilidades que la temporada pasada asumían otras personas. Menos personas, más trabajo. La figura del analista era inexistente más allá de los realizados por Pellicer. Ahora, el de Nules cuenta con Juan Francisco Roldán para que se encargue de sacar el bisturí de manera interna. Es decir, analizar los entrenamientos y partidos de los boquerones, no de los rivales.