Dioni y Roberto, más allá de ser rivales por ser el hombre gol del Málaga CF, han demostrado trabajar juntos en un mismo objetivo. Los delanteros del Málaga se ayudan.
Es común encontrar vestuarios de equipos de fútbol que no favorecen a la unión de la plantilla o que, por culpa de los egos, merman el ambiente del vestuario. Por todos es conocido ese carácter natural del delantero de marcar los goles para dar por cumplido su rol en el equipo. En el Málaga, ahora mismo y salvo alguna excepción, no es así. El conjunto de Pellicer cuenta con el máximo goleador histórico de la categoría en sus filas y un joven jugador que promete. El ariete del equipo es Roberto, mientras que Dioni, gracias a sus capacidades, se ha reinventado en un mediapunta para entrar más en juego. Al margen del debate de si esto es beneficioso o no para los boquerones, ambos jugadores conviven sobre el verde y se ayudan para lograr un objetivo común. El mayor ejemplo de esto lo vimos en Mérida.
En el minuto 17 y con 0-0 en el marcador, el colegiado del encuentro señaló penalti sobre Dioni. Todo parecía indicar que sería el ’17’ el que se encargaría de golpear, pero saltó la sorpresa y fue el de Puente Genil el que se acercó hasta los 11 metros para lanzarlo y meterlo. Tras el partido, Dioni fue cuestionado por eso y él mismo lo explicó: «Antes de los partidos se saben quién tira los penaltis y Roberto estaba primero. Él me respeta como veterano y le he dicho que lo tire él, pero no por los otros que fallé. Él estaba el primero en la lista«.
Es interesante que, aún sabiendo que era el primero en la lista, Roberto preguntase a Dioni si lo quería golpear. Esto muestra una solidaridad entre ambos compañeros que saben que no están pasando por su mejor momento. Con ese tanto, el ‘9’ supera a Dioni como máximo goleador del equipo con cinco tantos, mientras que el otro tiene cuatro.
