No va a tener una salida fácil el Málaga este fin de semana. No solo por los problemas internos que tiene el equipo blanquiazul. Los de Pepe Mel están bajo mínimos con tanto inquilino en la enfermería. Esteban Burgos será duda hasta última hora, pero los de Martiricos pierden a Juande y Cristian. Dos titulares. Enfrente estará el Levante, un equipo que no pierde desde octubre, un coco que quiere volver a la élite.
Pese a que acumulan dos empates consecutivos y que viven en una zona más que privilegiada, los del Ciutat de Valencia zozobraron a principios de curso. El club le dio el proyecto a Nafti. Solo aguantó nueve jornadas en el cargo al sumar únicamente dos victorias. Tras una breve etapa transitoria de Felipe Miñambres, el Levante eligió al exmalaguista Javi Calleja. No se sentará en el banquillo por la expulsión que sufrió en Lugo, pero su efecto se ha hecho notar. Tres victorias y tres empates. No conoce la derrota.
El Levante, una plantilla para subir a Primera
Con la baja de un Roberto Soldado que pudo ser blanquiazul en el pasado, la lanza de ataque parece que será para Bouldini. Es el máximo artillero de los granotas. Tres goles en el presente curso. Más allá del delantero marroquí, el plantel que tiene el Levante es uno de los más completos de la Segunda División. Además de Soldado, siguen de baja Rober Ibáñez o Mustafi. Jugadores como De Frutos, Iborra, Álex Muñoz o José Ángel Campaña forman parte de un proyecto moldeado para subir sí o sí el próximo curso.
Los números como local del Levante no son demasiado potentes pese a ser un coco que quiere volver sí o sí este año próximo a la élite. Es ahí donde el Málaga quiere intentar rascar algo positivo. El Levante es el 13º equipo como local en lo que llevamos de temporada. Solo han podido sumar 14 puntos en los 24 disputados en su feudo. Es cierto que estos números engloban la etapa de Nafti (7 de 15) frente a los de Javi Calleja (7 de 9).