10 de octubre de 1998. Ya ha llovido bastante. Como se suele decir, el fútbol no tiene memoria pero aquella tarde, el Málaga conquistó Leganés y sucedió una anécdota que es imposible de olvidar. La samba de Basti se dejó ver por Butarque. Doblete del histórico delantero malaguista y que supuso, hasta la fecha, la única victoria blanquiazul en ese estadio.
El 0-1 lo fabricó Catanha. Jugada espectacular del atacante brasileño. La bola le llegó a al malaguista que no perdonó ante la meta del histórico Unanua. Gol de Basti y baile a modo de samba paleña en Butarque que aun la recuerda buena parte de la afición.
El 0-2 también lo anotó Basti. Medio cayéndose, pero también valió igual. Asistencia del ‘Chino Zárate’ y una victoria que certificaba la velocidad de crucero que llevaba aquel Málaga de Joaquín Peiró. Es cierto que luego se complicó el camino hasta la famosa conjura en Logroño.
Los siguientes precedentes no son nada halagueños para los blanquiazules. Dieciocho años después de la samba paleña de Basti, el Málaga y el equipo pepinero se volvían a ver las caras. Eso sí, en Primera División. De hecho, el propio Basti viajó como talismán a Leganés para tratar de dar suerte. No pudo ganar en su visita a Butarque. Empate 0-0
La última vez que se vieron las caras en Primera División fue en la nefasta temporada 2017/2018. Último año de los blanquiazules en Primera y dolorosa derrota en Butarque. Tropiezo gracias a los goles de Eraso y de un viejo conocido como Nordin Amrabat (2-0).
Tres campañas después, los dos equipos volverían a verse las caras esta vez de nuevo en la categoría de plata. El Málaga no rascó nada y otra victoria de los madrileños (1-0), esta vez con un gol de Róber Ibáñez.
