La LigaSmart Bank empieza ya a descontar sus jornadas para el final de temporada. En el Málaga, la derrota de este fin de semana ante el Zaragoza ha dejado claro que el objetivo por el que lucharán los blanquiazules será el de la permanencia en la categoría de plata. Así lo ha explicado Sergio Pellicer en sus últimas comparecencias y el vestuario. Los malaguistas sitúan la permanencia en los 50 puntos, por lo que las cuentas son claras. El Málaga es 14º con 38 puntos por lo que para llegar a esa mágica cifra necesitaría al menos ganar cuatro de los once partidos que todavía les quedan por disputar.
En esa visión hacia delante en el calendario, el Málaga juega con una baza extra. Los costasoleños jugarán seis de esos últimos once encuentros como local. Una garantía para un equipo que este curso solo ha perdido en casa contra los tres primeros de la clasificación (Cádiz, Zaragoza y Almería). La victoria de los de Víctor Fernández en La Rosaleda puso fin a una racha de nueve partidos sin conocer la derrota como local.
Los blanquiazules tendrán que recibir en casa a tres rivales directos por la permanencia. En la jornada 34 será el Extremadura de Manuel, en la 38 el Albacete y Deportivo en la jornada 39. Tres enfrentamientos claves para conseguir permanecer otro curso en Segunda. La Rosaleda puede ser jueza también del ascenso ya que Girona y Huesca tienen que visitar el feudo boquerón siendo el Alcorcón el partido definitivo del curso en casa en la jornada 41.