Orlando Sá será el único fichaje que podría estrenarse en el debut del Málaga ante el Valladolid de esta tarde a las 19 horas (101TV). Pero el encuentro también tendrá más atractivos. Suele ser así en pretemporada. A falta de refuerzos, es el momento de que los jóvenes canteranos derriben definitivamente la puerta del primer equipo. Es la oportunidad de sus vidas.
Es algo que se repite cada verano. Y el conjunto malagueño bien sabe de ello. El pasado verano, por ejemplo, permitió ver el adn de toque, pase y juego combinativo de Ramón Enríquez. Poco después, el centrocampista llegaría a ser internacional sub-19.
En esta ocasión no va a ser menos. Los hay ya consagrados en el primer equipo como Ismael Casas, Juande o Hicham. Los hay que son habituales en entrenamientos y convocatorias como Iván Jaime, el recientemente renovado Cristo Romero o el citado Ramón Enríquez. Y los hay que esperan por fin la oportunidad de sus vidas como el portero Dani Karl Strindholm, los delanteros Julio y Mike, los centrocampistas Quintana y Mini, o los mediapuntas Juan Cruz y David Larrubia.
Todos ellos esperan aprovechar la pretemporada para ganarse aún más la confianza de Pellicer. Y hacerse con un hueco definitivo con los mayores como ya hicieron en veranos anteriores los En-Nesyri, Antoñín, Harper, Samu García y compañía. Es, como decíamos, la oportunidad de sus vidas.