La mala suerte se ceba con el Málaga

Seis jornadas ya se han disputado en el campeonato liguero 21/22. El conjunto de Martiricos, con 5 goles a favor, no refleja en sus estadísticas el juego que está desplegando. La mala suerte se ceba con el Málaga de cara a puerta, y los 5 largueros que ha impactado le ‘roban’ puntos muy importantes de cara a lo que queda de curso.

Fue el caso del partido frente al Mirandés. En ese momento, una estrella irrumpió en el panorama malaguista. Kevin Medina debutó con la blanquiazul como titular, y su gran actuación pudo ser culminada con un enorme golazo. La lástima fue que se estrelló en la madera, pero ese tanto por la escuadra hubiera otorgado al Málaga dos puntos más de los que consiguió con el empate.

En Ibiza sí que hubo mayor suerte, aunque las concesiones atrás mantuvieron el empate en el marcador. No obstante, en la vuelta a La Rosaleda frente al Alcorcón, la película que habíamos visto frente al conjunto de Miranda de Ebro en la primera jornada siguió rodándose sobre el verde. Mismo protagonista y misma resolución. Kevin volvió a estrellar, en el mismo punto del larguero y desde la misma posición, un balón que podría haber supuesto el gol de la tranquilidad. No hubiera cambiado el resultado final, pero sí que hubiese consagrado el buen juego del equipo.

Frente al Almería, la maldición del larguero volvió a castigar, y esta vez con influencia en el encuentro. Braian Cufré estrelló una falta casi perfecta a la misma escuadra en un encuentro que, de haber subido ese tanto, se habría inclinado probablemente en favor del Málaga. Otros tres puntos que se escaparon y que el larguero pudo negar a los de José Alberto.

Llegó el partido contra el Girona, y por supuesto, la madera volvió a entrar en acción. Una buena jugada de Paulino terminó en un zambombazo al poste derecho de la portería que negaba el primer tanto malaguista. A pesar de ello, esta vez el equipo pudo sobreponerse, terminando con un 2-0 a favor y los tres puntos en el bolsillo.

El último acto de esta obra dramática llegó en el peor momento de todos. Con el 1-0 a favor de la Ponferradina, quién sino Kevin Medina estrelló el balón al larguero. Un ‘centro-chut’ que, de acabar dentro, hubiera supuesto el 1-1 y un bálsamo para el Málaga en ese aciago encuentro.

La mala suerte se ceba con el Málaga de cara a puerta, y no parece tener fin. El larguero se está convirtiendo en uno de los aliados de los rivales, y habrá que afinar la puntería para poder perforar la meta rival.