El técnico asturiano analizó la derrota de su equipo. La síntesis y el resumen es claro para el preparador malaguista. La contundencia. Arriba y atrás. «Creo que hemos hecho un buen partido exceptuando el primer gol de Borja. No hemos estado nada cómodos. A partir de ahí me voy contento con el partido que hemos hecho. A medida que iban avanzando los minutos tenía la sensación de que estábamos más cerca de conseguir la victoria. Al final esto es fútbol y contundencia. Lo decía en la previa. Para ganar aquí o para ganar en esta categoría necesitas contundencia en las dos áreas. En la situación de Antoñín nos faltó esa pizca de suerte de pegar en el palo y que se fuera para dentro. Hubiese sido lo más normal, pero luego hay que defender bien la situación del centro lateral. Al final las áreas determinan esta categoría.»
El míster blanquiazul fue cuestionado por los resultados a domicilio. Sigue sin llegar el primer triunfo a domicilio. A José Alberto no le preocupa. Viendo lo que veo nada. Esa es la realidad. Creo que hemos hecho un buen partido. Hemos estado más cerca de ganar que de perder. Esto es Segunda División. Vuelvo a insistir, la contundencia es lo que hace marcar la balanza de un lado u otro. Ahí es donde tenemos que mejorar. En nuestra área no puede entrar solo un jugador en el minuto 90+3 y que remate. Al igual que en la contra que hemos tenido hay que matarla.
De nuevo Kevin Medina fue cosido a faltas. El canterano acabó con un esguince en su tobillo izquierdo y habrá que ver si llega para el siguiente encuentro del Málaga CF, este jueves en La Rosaleda. Está mal. Al final es un jugador que lo están cosiendo a palos en cada partido. Es difícil que pueda recuperarse. Al final en la selección española tenemos buenos jugadores, jugadores de posesión. Del tal conocido tiki-taka, pero no tenemos regateadores. Vamos a acabar con ellos. No solo a Kevin. A todos los jugadores que tienen ese tipo de características se le tiene que proteger un poco más. No hay, escasean.
José Alberto vete a tu casa
Totalmente de acuerdo, Miguel Damián. A ver ahora quien sigue defendiendo al asturiano con esa táctica de equipo súper pequeño y que jugó a merced de un Oviedo que no tenía nada.
No pasa nada, los periodistas siguen defendiéndolo. Así nos va.