Jesús Gámez ya piensa como ex futbolista. Tuvo el sueño de retirarse con la camiseta del Málaga, pero Caminero se lo impidió. Ahora, este 17 de agosto, ha hablado muy claro en Radio Marca Málaga del pasado, del presente y del futuro del Málaga. No se anda con chiquitas.
«Ha perdido la esencia, gente importante en el club. No veo dentro de ese vestuario los líderes que había anteriormente. Es gente conocida, pero no veo que tengan esa fuerza que transmita y tenga la conexión con la grada. O sepan identificar lo que es llevar esa camiseta. Digo en el vestuario y arriba», ha explicado el fuengiroleño.
Pero de ese pesimismo, Jesús Gámez quiere ve algún brote verde. «Ahora, menos mal que está Manolo Gaspar, que es un tío de la casa, que lo va a defender con uñas y dientes porque es parte de su vida. Por ahí transmite. Pero ha habido años en los que no me veía identificado con nada de lo que sucedía ahí. Y es una lástima porque al final suceden las cosas que suceden. Nada es una casualidad con lo que está sucediendo ahora».
Entre otras, la decisión de prescindir de valores importantes del club, incluso más allá de su profesionalidad, como Miguel Zambrana o Marcelino Torrontegui. «Perdemos la esencia y el poder del vestuario. Que no se equivoquen porque de ese vestuario es de donde sale todo. La columna vertebral comienza por ahí, con los utileros, con el doctor… de ahí arranca todo. Con ellos notas la esencia del club, de ahí a los jugadores y así».
También se ha acordado en varias ocasiones de Al Thani. «Ha sido capaz de lo mejor y de lo peor. Entonces, cuando haces lo mejor y no te involucras y no estás aquí y no disfrutas, me pierdo. En Champions no estaba aquí y no lo disfrutaba. Luego, cuando pasa todo, estamos sancionados, no jugamos nada, aparece. Y después tiene un proyecto bonito, para hacerlo con un buen presupuesto, y vende jugadores. Hay un momento que me pierdo porque no sé qué va a hacer», ha confesado.
Los impagos en tiempos de Champions
Como también ha reconocido lo que en su día contó Radio Marca Málaga, que había impagos en los tiempos de Champions. «Estábamos en cuartos de final de la Champions y nos debían tres meses. O lo sacabas en el campo para cobrar o no te queda otra. Lo económico depende de lo que pase en el campo. Hacíamos una reunión al día y no hablábamos de fútbol sino de denuncia, de la AFE, LaLiga…».
Gámez ha seguido profundizando sobre aquel espinoso asunto. «Había muchos perjudicados. O se ponía dinero o descendíamos. Y entraba en juego que si tú no denunciabas antes de que eso pasara, LaLiga no se hacía cargo de tu contrato. Era algo muy complicado porque te decías «¿yo voy a denunciar a mi club?«, pero si no denunciabas te quedabas sin que nadie respondiera a tu contrato. Al final fueron tres los que denunciaron salieron del club. El jugador tiene que estar pendiente de jugar al fútbol, pero hay situaciones que al final te involucran».
Y de cara al futuro, Jesús Gámez espera que pronto se tomen decisiones de calado por el bien de la entidad. «Ahora, con el administrador, es momento de que tomen decisiones, lo antes posible, y se pueda revertir la situación. Porque cuanto más tiempo pase va a ser peor. Si no, estamos hablando de años para crear un proyecto, subir al equipo y será más complicado».
