El ERE en el Málaga ya es historia porque los jugadores aceptan su despido. Adiós, por tanto, a la etapa como malaguistas de Luis Hernández, Diego González, Juanpi, Renato Santos, Pacheco, Rolón, Boulahroud y Cecchini. Todos ellos, aunque AFE no estaba convencida, han aceptado junto al Comité de Empresa (CCOO) la última propuesta del administrador judicial.
La indemnización por sus despidos se queda en algo más de 20 días por año trabajado, que había sido la propuesta inicial de la entidad de Martiricos. Han arañado un poco en una negociación que, al final, ha dejado a Lombán y a Benkhemassa con sus contratos activos por el mínimo profesional. Ellos dos sí se quedan.
Con el despido de los ocho jugadores, el Málaga libera la masa salarial necesaria para cumplir con el fair play financiero establecido por LaLiga. Para esta temporada, ese tope está situado en poco más de 3 millones, en los que hay que incluir el importe de todos los finiquitos.
Hay que recordar que la entidad de Martiricos está sancionada -como ya adelantó en enero Radio Marca Málaga- con la imposibilidad de inscribir a más de 18 futbolistas en el primer equipo. Además, le redujo al máximo el dinero que podía gastar en la configuración de la plantilla inscribible. Sin ventas millonarias a la que acogerse, la única opción para el Málaga era el ERE que los jugadores aceptan. Ya salieron con un acuerdo y sin esperar a su ejecución Munir, Adrián, Juankar y Cifu, lo que ahorró medio millón en indemnizaciones y unos 3 millones en fichas. Ahora, deberán abonar a los ocho despedidos en torno a un millón. A cambio, dejarán de pagar más de 6 millones en salarios esta temporada.
Por su profesionalidad y malaguismo, me da pena la marcha de Luis Hernández. Mucha suerte Luis, te llevas el buen recuerdo de muchos malaguistas.