El juzgado de Primera Instancia número 12 de Málaga, que tramita el denominado caso Bluebay, ha ordenado la ejecución provisional de la sentencia por la que la empresa Nas Spain 2000 SL recupera la titularidad del Málaga CF SAD. Esta sociedad, de cuya gestión era responsable Bluebay, está participada en un 49% por una filial de la empresa hotelera (Management Empresarial) y en un 51% por Abdullah Bin Nasser Al Thani (a través de Nassir Abdullah & Sons) y dispone de las acciones del club que en su día el jeque le compró a Fernando Sanz: 565.861, o lo que es lo mismo, un 96,8% del total. Además, el juez ha ordenado la inscripción de la titularidad en el Registro de Asociaciones Deportivas del Consejo Superior de Deportes (CSD).
De este modo, en el supuesto de una partición de la sociedad, BlueBay se quedaría con 277.272 acciones de la entidad blanquiazul, número que no le daría la mayoría absoluta ni tan siquiera con un acuerdo con la APA porque el jeque, como así indica el informe de la Policía Judicial, ha ido comprando más títulos a minoristas para asegurarse el control final. Cuestión que, precisamente, también se está investigando por supuestas irregularidades.
En todo caso, la gestión del Málaga seguirá en poder del administrador judicial impuesto por la jueza de lo penal que juzga el caso en el que Al Thani está acusado de supuestos delitos de blanqueo de capital, administración desleal y apropiación indebida.
Pero ahora, la empresa dueña del club no es Nas Football (100% del jeque) sino Nas Spain 2000 SL (51% jeque-49% BlueBay), por lo que se abre una nueva vía de colaboración entre BlueBay y el propio administrador para poner soluciones más rápidas y efectivas para el futuro del club. En la próxima Asamblea de Accionistas, prevista para el 2 de abril pero que podría retrasarse por el coronavirus, ya podrían aparecer los representantes de BlueBay como parte de Nas Spain.
Así comenzó el caso Bluebay
La empresa hotelera denunció en febrero de 2015 al jeque catarí por apropiación indebida por unos hechos que se remontan a 2013 cuando la empresa Nasir Bin Abdullah & Sons cedió, previa autorización del Consejo Superior de Deportes (CSD), la propiedad del Málaga CF a la nueva sociedad Nas Spain 2000, controlada en un 51 % por Al Thani y en un 49 % por Management Empresarial, una filial de Bluebay, que se encargaría también de la gestión para reducir la deuda del club que por entonces era superior a más de 100 millones de euros.
Sin embargo, cuando meses después se estabilizó la situación y el club volvió a ser viable desde el punto de vista económico, Al Thani se echó atrás, fundó otra sociedad en junio de 2014, Nas Football S.L., a la que volvió a transferir la totalidad de sus acciones, asegurando al CSD que la anterior venta no se llegó a completar a pesar de que todos los documentos habían sido firmados ante notario.
Durante estos años, el jeque ha intentado retrasar este proceso civil con una demanda por la vía penal a sus antiguos manos derecha, Abdullah Ghubn y Moayad Shatat, así como a Jamal Satli Iglesias, propietario de Bluebay, por falsedad documental, entre otros delitos. Un juicio que perdió Al Thani dos años y dos apelaciones después, lo que permitió reanudar la demanda civil originaria y de la que ahora ya hay sentencia. La que obliga a devolver las 565.861 acciones a Nas Spain 2000 SL, participada por Bluebay en un 49 % y por el propio jeque en un 51%.