El gol es una asignatura pendiente del Málaga. Hay peores equipos en esta faceta, pero mal de muchos… 20 goles en 22 partidos es demasiado poco bagaje como para confiarse. Y el problema es que quienes tienen que demostrar esa habilidad en la faceta rematadora, los delanteros, no destacan por ser killers del área.
En la plantilla profesional hay tres delanteros natos. El más utilizado, y el que más está destacando, es Pablo Chavarría. El punta argentino ha anotado 3 goles en los 16 encuentros en los que ha intervenido. Cierto que ofrece otras variantes y recursos ofensivos, pero falta ese instinto depredador.
El segundo en confianza es Caye Quintana. El futbolista cedido por el Cádiz no se prodiga tampoco de cara a la portería contraria. Un gol en Liga y otro en Copa es su balance. No es un ariete y muchos minutos los ha disputado escorado a banda o por detrás del punta. Pero la puntería no parece ser su principal habilidad.
Del que sí se esperaba más a pesar de su larga inactividad es de Orlando Sá. Al contrario que sus otros dos compañeros, el portugués no se ha estrenado en Liga. Sí lo hizo en Copa ante el Coruxo. También es verdad que sólo ha jugado un tercio de lo que han hecho Caye y Chavarría. Pero su nivel ha estado también por debajo del ofrecido por estos.
El sistema, ¿la respuesta?
Pellicer ha alineado todos los dibujos posibles. Desde una defensa de 5, hasta el más habitual 4-2-3-1 que se puede convertir en un 4-3-3, o el clásico 4-4-2. Sin embargo, la generación de ocasiones claras y manifiestas no sobran, al contrario.
No llegan balones centrados al área cuando Orlando Sá se encuentra por ahí. Chavarría tiene que caer a banda para ver el balón o recibir de espaldas. Y Caye, que actúa más de cara, tampoco es de los que se puede fabricar la jugada por sí solo.
Entre los tres, sólo cuatro tantos anotados en Liga en lo que llevamos de temporada. Que es una vuelta y un partido de la segunda. Llamativo que el Pichichi sea Juande, un central, con cuatro goles, que ha marcado lo mismo que el trío de delanteros. El gol en el Málaga, especialmente en los delanteros, es una de las asignaturas pendientes que hay que solventar.
