Córdoba CF y CD Castellón cerraban la jornada 33 en el grupo 2 de Primera RFEF. Un domingo en el que el Málaga CF volvió a dejar serias dudas y dejó escapar dos puntos en casa frente al Real Murcia. Para más inri, la UD Ibiza perdió en casa frente al filial del Atlético de Madrid y la AD Ceuta hizo los deberes en el Alfonso Murube ante el Atlético Baleares. Por lo que, la zona del playoff sigue apretándose al máximo. El Córdoba le quita la independencia al Málaga.
A las puertas de lo que parecía ser un derbi decisivo la próxima semana, los de Iván Ania se enfrentaban a domicilio contra un CF Intercity que está pasando por su peor momento económico. Poco necesitó el equipo blanquiverde para dar un golpe sobre la mesa con respecto a la segunda plaza. Después de un inicio de partido sin apenas ocasiones, casi llegados a la media hora, Carlos Albarrán hacía el primer tanto del encuentro. Ya en la segunda parte, el exmalaguista Kuki Zalazar, con otro zapatazo, cerraba el partido. (0-2)
Una victoria que sirve a los de la capital califa para llegar con una ventaja de cinco puntos al duelo frente al Málaga del próximo fin de semana en el Nuevo Arcángel. Es decir, el Málaga ya no depende de sí mismo para arrebatarle el puesto en la tabla a los blanquiverdes tras su pinchazo este mediodía. Además de jugar con la clasificación muy a favor, los cordobesistas también contarán con un factor cancha providencial en lo que podría ser un partido determinante para ambos en varios sentidos.
Por otra parte, el CD Castellón no falló en Linarejos y continua con su ventaja de ocho puntos. Los albinegros se acercan al canto del alirón con aún 15 puntos en juego. El combinado de Dick Schreuder sufrió ante el Linares Deportivo, errando un penalti en el 77′ y obteniendo el gol de la victoria en los minutos finales del partido. Iago Indias en el minuto 86 certificaba más de medio ascenso directo con un gol a pase de Sergio Moyita.
Los resultados de la tarde no benefician en absoluto a un Málaga que ha perdido la independencia contra el Córdoba en esta jornada. Dicho lo cual, se convierte en la enésima oportunidad de la temporada que desperdicia el combinado de Martiricos de cara al objetivo. Restan 15 puntos de liga y el Málaga viajará a Córdoba con la presión de certificar su presencia en las eliminatorias de ascenso y de no meterse en un posible lío clasificatorio.
Hombre …presión, lo que se dice presión por no meterse en las eliminatorias no creo que tenga el Málaga.
Le basta sacar 5 puntos de 15 para estar clasificado matemáticamente aunque sea quinto. Otra cosa es la presión por ser segundos (casi imposible) o terceros de cara a futuras ventajas en los play off.
Esa es la diferencia entre salir a ganar aunque se pueda perder y salir como el Málaga verlas venir y intentar empatar, saliendo a ganar de 5 partidos podrás perder 2 osea 9 puntos y saliendo a empatar podrás ganar 1 peder otro y empatar 3 osea 6 puntos, así se comprende que a lo largo de la temporada nos saquen tantos puntos, pero eso sí Pellicer contento porque el aprendizaje va bien, y el cuerpo nos lo ha ido preparando a los aficionados que pocos son los que creen ya que jugando así en un play off podamos pasarlo
La única manera de subir empatando, pasa por acabar la liga siendo «Subcampeón». Cada vez son menos las posibilidades pero, cosas más raras se han visto.
La liga no ha acabado y, «hasta el rabo,todo es toro»
¿ Que si hay que ir a Cordoba se va, pero ir pa na como que no ? este Malaga no gana en Cordoba ni jugando diez veces, vamos de mal en peor, los Sangallis y compañia como que no dan la talla, que desproposito.
este equipo solo juega como los cangrejos para atrás, y el entrenador, estoy de acuerdo con Merchán, si no es capaz de corregir esta tendencia a retroceder en lugar de avanzar (cosa que son muchas semanas ya) le viene grande el equipo, ha inculcado el repliegue defensivo, la formación en tortuga que practicaban la legiones romanas que no sabe hacer otra cosa cuando el rival no le ataca.
Ni lo va a superar en la próxima jornada ni tampoco en las siguientes … es lo que tenemos y la realidad con los pies en el suelo y la cabeza bien fría.