La victoria del Málaga sobre el Alcorcón en La Rosaleda dejó buenas sensaciones dentro del vestuario blanquiazul. Todos y cada uno de los efectivos boquerones dieron el máximo sobre el verde. Aunque alguien destacó de forma especial. Era su tercer partido oficial como jugador del Málaga y, en su debut sobre el césped de Martiricos, fue capitán ante la baja por lesión de Ismael Casas. El brazalete mágico de Escassi.
Fue el líder por lo que portó en su brazo izquierdo, pero también por su actuación: fiabilidad en la salida con balón jugado, seguridad en las marcas, efectividad en los cortes, el primer apoyo de sus compañeros en las escenas a balón parado… Estuvo en todas. Al futbolista malagueño le sienta bien la línea de cuatro en defensa. Ocupar la parcela izquierda de la zaga vigilando el crecimiento y la madurez de Juande por derecha. Pero claro: cuando regrese Ismael Casas, ¿qué va a pasar?
La cuestión es que a Alberto Escassi se le vio muy cómodo en dicha demarcación. Además, ya se apreció en Castellón que el ’23’ boquerón se anima con las faltas lejanas. Incluso Pellicer podría avanzar su posición hasta el centro del campo. Ofrece muchas prestaciones y cada vez está más integrado e implicado en lo que el míster quiere de él. Es uno de los capitanes en este Málaga. El brazalete no le sentó nada mal.
