El domingo vuelve el fútbol para el Málaga CF y lo hace con la esperanza de poder revertir una situación más que complicada. Nadie esperaba este arranque dubitativo, una crisis de juego, de identidad y de resultados. Más si cabe con la figura de Pablo Guede en el entredicho y que ahora mismo está en el centro de la diana para buena parte de la afición. Ese el escenario actual y los blanquiazules afrontan dos salidas en las que tendrá responder lejos de Martiricos. Dos estaciones para la esperanza: Huesca y Tenerife. Dos rivales que tampoco han arrancado de la mejor manera posible el campeonato y en la que el Málaga quiere hacerse fuerte.
Y es que los blanquiazules afrontan dos encuentros consecutivos a domicilio. Casualidades o no, las únicas tres victorias que suma Guede como técnico del Málaga CF desde que llegó el curso pasado se han producido como visitante. Una de ellas, precisamente en Tenerife.
De momento el club cierra filas en la figura del argentino. Manolo Gaspar respaldó públicamente a Pablo Guede y aseguró que está 100% capacitado para revertir esta crisis de juego y de resultados. Le toca al preparador malaguista confeccionar y coser un nuevo Málaga más seguro y contundente desde la línea defensiva a la par que acertar con el patrón de juego que tantas dudas genera.
Después de estas dos estaciones que pretenden servir como esperanza al malaguismo, los blanquiazules recibirán en casa al filial del Villarreal. Partido con el morbo del retorno de Javier Ontiveros a La Rosaleda.