El tren de la permanencia en Segunda se acerca a su estación final. El Málaga llega con cinco puntos de ventaja sobre sus rivales, Amorebieta y Real Sociedad B. Los blanquiazules han respirado hondo después del triunfo contra el Tenerife que ha permitido que el partido contra el Burgos pueda ser el de la permanencia matemática siempre que se consiga la victoria o se den los resultados adecuados. Esa victoria malaguista en la isla, junto a la del Sporting contra el Girona, han arruinado la moral de sus rivales directos por la permanencia. Así nos lo cuentan para Radio MARCA Málaga desde Bilbao (Amorebieta) y San Sebastián (Real B).
“Es un milagro muy complicado. Nos la prometíamos muy felices suponiendo que Málaga o Sporting iban a pinchar. Decía el entrenador que no había sido tan bajón, pero su gesto era diferente. Estando de nuevo a 5 de la permanencia con 6 por jugar es difícil”, comentaba Iker Torrescusa de Radio MARCA Bilbao. “Hay que esperar a que falle el resto y hacer los deberes. Si no los haces no sirve de nada. Este partido contra el Cartagena se puede conseguir a pesar de haber conseguido solo una victoria fuera de casa. Es un reto complicado, pero ellos no se juegan nada en lo clasificatorio”, explicaba sobre las pocas esperanzas que quedan por Lezama.
En Donosti el sentimiento es parecido, según relata Óscar Badallo, de MARCA San Sebastián. “Están hundidos por cómo ganó el Málaga en Tenerife. Se podría ganar en Huesca, aunque habría que hacerlo en las dos jornadas y que ni Málaga ni Sporting no ganaran ninguno. Conscientes de la opción que se ha perdido. Igual la presión puede ayudar, pero ante el Burgos lo normal es que el Málaga sume los tres puntos”, explicaba el periodista en directo. Badallo narraba el sentimiento con el que se vive en el filial de Xabi Alonso las dos jornadas finales. “Se han perdido partidos como Ibiza, Alcorcón o Tenerife. En Huesca habrá opciones, veremos si están acertados, pero somos conscientes de que si el Málaga no es capaz de ganar al Burgos, sería raro. Dos ciudades como Málaga y Gijón se tienen que agarrar a la Segunda División”, sentenciaba.
El Gijón, el pensamiento es parecido al que se tiene en la Costa del Sol. “Hay que rematar la faena. La victoria del pasado fin de semana es importante, pero el Fuenlabrada es un rival raro. La probabilidad de permanencia es muy alta. Malo sería que bajara el Sporting con 5 puntos de ventaja y 6 por jugar. En Fuenlabrada no quedan entradas ni visitantes ni locales. Se prevé una invasión del Sporting allí”, analizaba en directo Senén Morán.
“La clave ha sido el factor Molinón. Hacía años que no lo veía. Estaba muy encima en cada posesión del rival, en cada balón dividido. Fue un gran Molinón. Cuando juntas un estadio que aprieta tanto todo el partido y un equipo que compitió -que no lo hacía antes- es muy difícil ganar en Gijón. Ganaron a un rival que peleaba por cotas altas como es el Girona y lo tienen medio hecho”, culminaba. Así está el tren de la permanencia en Segunda para el Málaga y sus rivales.
El Málaga depende de si mismo. A luchar a muerte para ganar los partidos que quedan. Después limpieza y regeneración.