«Algunos ven al club como una gran teta de la que mamar»

Gabinete de crisis en Radio MARCA Málaga. Después de la polémica estampa con la retirada de la pancarta mostrada por la Peña Universitaria, su vicepresidente José Antonio Beltrán, se pasa por el micrófono rojo. También charlamos con Antonio Aguilera, presidente de la Asociación de los pequeños accionistas del Málaga CF, para abordar la situación actual que vive la entidad de Martiricos. Esto es lo que nos dijeron.

Momento de la pancarta

Todo estaba hablando con La Grada Animación. Dada la situación del club, acordamos exhibirlas al final del partido y animar los 90 minutos, pero los cánticos empezaron en el descuento, por lo que teníamos que hacerlo ahí. Estábamos aún en directo y nos veía toda España por lo que sacamos las pancartas. Nos arriesgamos. Tras esto, vino un señor corriendo y nos pegó un manotazo. No se identificó y nos dijo que las pancartas fomentaban la violencia. Le pegó un manotazo a la pancarta y, según me cuentan, empujó a una persona en las escaleras. No venía uniformado y no quería identificarse, cosa que debe hacer. Le dije que vulneraba los derechos que tenemos y que le iba a demandar. Luego se apartó y pasó todo lo que vimos. Al día siguiente el club sube ese comunicado y claro, nos extraña, porque lo normal no es esto, lo normal es ir con un compañero de seguridad o incluso con la policía. Fue desagradable. Es lo que faltaba, que nos callen la boca y que coarten nuestra libertad de expresión. Aún nadie se ha puesto en contacto con nosotros. Y pese a todo, estaremos siempre por el escudo. 

Queja de la afición

En la peña estamos 130 abonados como socios, aunque crean que somos menos. Pero no es cuestión de números ni de peña, es que nos duele este equipo, es malaguismo. Cualquier persona que tiene el abono, sea donde sea y con las opiniones que sean, defiende el Málaga. El Málaga es un escudo, una historia, un sentimiento, esos guiris, esos niños, la gente que no tiene dinero y se saca el abono. El Málaga somos todos. Nuestra obligación como peña es canalizar todo esto. Si vemos que este equipo se está muriendo, lo mínimo es juntarnos y estar unidos. Y hay que apoyar a los jugadores porque, estén como estén, son los que nos tienen que salvar de esto, aunque a algunos de vergüenza llamarlos profesionales. Somos la mejor afición de España, seguimos yendo al estadio y animando.  

Lo que pasó en Sevilla, pese a nuestras diferencias con ellos, es un ejemplo. Ver cómo nos marcan goles y nadie reacciona, una desidia total. Mientras el Málaga nos duela, estaremos vivos. El Málaga no son directivos, somos nosotros y hay que defenderlo ahora. Queremos fomentar el apoyo en la grada y las protestas en la calle. Yo voy a poner los medios para que las peñas y grupos de animación nos unamos, aunque algunos no hablen, para poder juntarnos y hacer movilizaciones. La grada y la Peña Universitaria siempre estará. Como fuimos con Al Thani, y el asunto de la concursal cuando fuimos a Segunda División, se reían de mí, pero ahí estamos y estaremos siempre. Hay que remar todos a una ahora, porque cuando estemos en la mierda, no quiero que nadie venga llorando.

Situación de cortijo, sin dueño

Hay muchos antecedentes, véase el Mallorca o el Dépor, y lo que dice Manolo en rueda de prensa de que es el año en el que más ha crecido a nivel personal es para salir corriendo y pegar en la puerta. Algunos ven al club como una gran teta de la que mamar. Y si el administrador no es capaz, que se vaya y que otro lo haga, porque se ha “acortijado”. Hay que señalar con nombre y apellido a los responsables de esto, incluso los que no suenan como Guerra.   

Esto nos duele a los desgraciados como yo, que trabajamos 12 horas al día y nuestro descanso semanal es ver a este equipo. Me sacaré el carné aunque esté muerto.  

Antonio Aguilera: «Aquí hay que salir a la calle y dar zapatazos»

Peligrosa deriva la que tiene el club de Martiricos para la APA. Su presidente, Antonio Aguilera pasa por Radio MARCA Málaga para hacer un diagnóstico de la situación y tratar de encontrar soluciones. «Que venga un mindundi a dárselas de director general… Ver jugar al Málaga es desesperante, driblar y venga a driblar, balones para atrás, sobar el balón. Hay que tener un patrón de juego. Para mí Pepe Mel también es culpable. Si los que hablamos claro somos reventadores del Málaga, que venga Dios y lo vea. A mi me duele el Málaga desde hace 54 años y se me encoge el corazón cuando mi nieto me dice que no quiere ir más al campo. Mi interés es saber si la juez está al tanto de todo lo que está pasando, porque no me explico la situación. Aquí hay que salir ya y dar zapatazos.

Se está hablando del director general, a estas alturas de la temporada y las altas opciones de descender, para qué. Lo que hay que mirar es cómo se van a despedir a tantos trabajadores para el año que viene. Hay que decirle a José María Muñoz que ya actúe, ya tendría que haber echado a Manolo Gaspar y Guede la temporada pasada frente al Burgos. No sé qué entrenador podría venir ahora. Si cesan a Manolo, no se va a ir del club porque es un trabajador fijo. Habría que despedirle doblemente. Aquí hay que tragar con todo, pero no. Queremos una viabilidad seria para el Málaga y que no desaparezca.