No solo va por el pronóstico climático de hoy sobre la Costa del Sol, sino por el rival que viene. El Málaga recibe al Rayo Vallecano de Iraola en el duelo de la 26ª jornada en Segunda. Los blanquiazules quieren acabar con los fantasmas ligueros como local –no vence en La Rosaleda desde el pasado 22 de octubre-, mientras que el conjunto franjirrojo desea seguir mirando a la zona privilegiada de la tabla. A protegerse de la tormenta se ha dicho.
Tras la derrota en El Molinón, y dejando buena imagen, el cuadro de Pellicer celebra la recuperación de efectivos y se enfrenta al dilema del once inicial. Alexander González puede seguir ganándole el pulso a Ismael Casas o Luis Muñoz regresar a la titularidad. Una batalla en la que regresará el último hijo pródigo –Antoñín, máximo goleador madrileño con seis dianas- y los visitantes amenazan con Álvaro García o Isi Palazón, la auténtica pesadilla malaguista de la ida.
La guinda al pastel
Este choque es el colofón a una deliciosa semana en clave boquerona, la guinda al pastel. Manolo Gaspar seguirá a los mandos de la dirección deportiva hasta 2023 y ayer se cumplió el primer aniversario de la historia con el administrador judicial, José María Muñoz. Qué mejor manera de cerrar la fecha que derribando, de una vez por todas, la pared de la mala racha anfitriona. Nueve duelos consecutivos en los que se escapa la gloria y las sensaciones no ayudan al optimismo. Seis puntos separan al club del descenso, además de que el nerviosismo comienza a invadir el ambiente. Por la afición y porque no hay mejor lugar para protegerse de la tormenta que en casa. A las 21:00, desde La Rosaleda, Málaga-Rayo Vallecano.