La Rosaleda vivió su noche más mágica desde que arrancó la temporada. El aficionado malaguista empezó y cerró el partido con el himno a ‘capella’ en una fiesta que permite a los seguidores blanquiazules recordar que era la felicidad. El templo de Martiricos presenció su mejor entrada del año llegando a los 24.773, nada más y nada menos que seis mil espectadores más que la que hasta hoy era la mejor entrada del curso, 18.231 ante el Almería en la jornada 4. El equipo se lo agradeció con una primera parte de lujo en la que las ocasiones no pararon de caer sobre la portería de Luca Zidane.
Pellicer no tuvo más remedio que dar las gracias a los aficionados después del partido durante la rueda de prensa ante los medios. “Este ha sido el primer lleno de la temporada, la afición siempre ha estado. La unión hace la fuerza y los jugadores lo sienten, hoy ha sido una fiesta completa. La división no nos lleva a ninguna parte. Cuando todos estemos alejados del contexto, habrá tranquilidad y calma. Hay que darles las gracias por toda esta temporada”, explicaba el preparador. Hasta el entrenador del Racing se rendía ante los aficionados malaguistas.
