Tenía la difícil papeleta de mantener la categoría nada más aterrizar a Algeciras la pasada temporada. Con esfuerzo y pese a las circunstancias del COVID-19, Salva Ballesta fue capaz de cumplir los objetivos marcados y dejar al conjunto gaditano en la categoría de bronce.
Después de meses de parón, el inicio de campaña es inmejorable para el que fuese jugador del Málaga CF y una de las grandes leyendas del cuadro boquerón. Con cuatro partidos ya disputados, el Algeciras comanda en solitario el grupo IV de la Segunda División B. El empate en la primera jornada y las tres victorias consecutivas sirven para liderar la clasificación.
Ilusión no solo en el vestuario, sino también en la directiva. Nicolás Andión, presidente del Algeciras, es uno de los más felices en estos momentos. La próxima jornada, la sexta, recibirán al Tamaraceite, que aún no conoce la derrota. Una prueba de fuego para certificar el excelso inicio de Salva Ballesta al frente del Algeciras.
