La selección española visita La Rosaleda esta domingo. La Roja se juega llegar a septiembre dependiendo de sí misma en la UEFA Nations League. Para eso, tendrá que ganar a una República Checa con la que empató hace unos días en suelo checo. Un dos a dos, que sumado al empate con Portugal en Sevilla y a la victoria por la mínima ante Suiza, ha dejado algunas dudas en el combinado nacional. Luis Enrique fue preguntado por esto en la víspera de su visita a Málaga. Sus palabras sacaron una sonrisa a los aficionados de la Costa del Sol.
“Les tenemos muchas ganas (a lo checos). Tenemos muchas ganas de jugar en Málaga. No es una pregunta para mí, sino para el aficionado. Los de Málaga están cachondísimos porque compraron las entradas en 15 minutos. Tenemos ganas de jugar allí y que se dejen el alma animando al equipo”, espetó Luis Enrique. El preparador asturiano conocer bien el templo malaguista. Sus palabras van dirigidas a una hinchada que agotó las entradas a los pocos minutos de salir a la venta. Se colgará el no hay billetes en La Rosaleda.
El seleccionador valoraba el partido también. Un choque que se resolvió con un gol de Pablo Sarabia. “El bagaje está condicionado por el resultado. Contento por el espíritu de los jugadores y la actitud. Es un partido positivo que nos da la posibilidad de depender de nosotros todavía. Esta selección llevaba ocho años invicta, 23 partidos oficiales sin perder en su casa y nosotros hemos tenido la posibilidad de ganarles”. La selección aterrizará el viernes en Málaga y entrenará viernes y sábado en las instalaciones del club blanquiazul antes de jugar el domingo a las 20h45 contra la República Checa. Luis Enrique quiere agradar en Málaga y seguro que sus jugadores se dejarán todo para conseguir un triunfo importante.