Brahim es la estrella de la selección española sub21. El mediapunta malagueño, ahora en el Milan, salió de suplente ante Islas Feroe y fue un volcán en erupción. En los 45 minutos que estuvo sobre el campo hizo lo que quiso con la defensa rival.
Entrando desde la derecha, mareando a sus pares mientras amagaba con la diestra para salir con la zurda o viceversa. Le daba igual. Un tormento para el contrario y dos goles que se apuntó para sentenciar el triunfo del combinado de Luis de la Fuente.
A Brahim parece que le ha sentado de maravilla salir del Real Madrid. En la temporada y media que ha estado con los blancos, apenas ha gozado de continuidad. Ahora, en un mes en el Milan casi ha jugado tanto como en el Bernabeu. Y de seguir a este nivel, pronto podría llegar al siguiente nivel.
Su primer tanto ante Islas Feroe llegó en el minuto 51. Después de una bonita pared con Javi Puado (Espanyol) el balón le llegó rebotado pero en magnífica posesión. No perdonó el 0-1. El segundo se hizo esperar pero sentenció la victoria. En el 90, hizo la de Messi. Entró en el área, fue amagando con tirar arrastrando defensas hasta que encontró el hueco para golpear y marcar. Parece fácil pero no lo es. En absoluto.
Una buena victoria para España en la que también disputó minutos otro malagueño como Antoñín. El ahora futbolista del Rayo Vallecano, cedido por el Granada, ya debutó en la anterior convocatoria contra Macedonia. Y en esta oportunidad, también entró en los planes del seleccionador para ver desde el terreno de juega la exhibición de su paisano.
Con Brahim como estrella de la sub21, la Rojita necesita ganar a Kazajistán el próximo día 13 para conseguir el para el Europeo de Hungría y Eslovenia.
