En Sabadell están de fiesta. Y su entrenador más. Antonio Hidalgo intervino en los micrófonos de Radio Marca Málaga para celebrar la hazaña del cuadro catalán derrotando al Barça B sobre el verde del Lorenzo Cuevas en Marbella. Cinco años después vuelven al fútbol profesional junto a Logroñés, Cartagena y Castellón. Una pequeña charla en la que el mito boquerón no se olvidó del malaguismo: «Lo único que pido es volver a La Rosaleda, pero con gente».
Una hazaña que no ha sido fácil. Un club que lo estaba pasando mal, pero que vuelve a ver la luz con Antonio Hidalgo sentado en el banquillo: «Estábamos siendo superiores al Barça B. En cualquier acción se te pueden adelantar en el marcador. No tuvimos ansiedad, pero sí fortuna. Al salir del descanso seguimos con el plan que teníamos en la cabeza y pudimos darle la vuelta al marcador«.
¿Cómo entiende Antonio Hidalgo el fútbol? Derrotó al filial culé con su propia medicina…: «Esa fue la idea que tenía en la cabeza. La he ido formando estos años después de retirarme. Gente que me ha aportado mucho como Andoni Iraola o durante mis años en el Barça. Hay que echar la pelota al suelo y estar lo más arriba posible para robarla. Así entiendo el fútbol y ayer, gracias a Dios, salió todo a la perfección».
También habló sobre la celebración y los múltiples mensajes de felicitación que le llegaron: «Lo primero de todo es la responsabilidad. La cosa no está para hacer cosas diferentes. Las llamadas más emotivas fueron las de mi familia. Saben lo que se sufre y todo lo que he pasado como entrenador. Pensando en mucha gente. Muchas horas de trabajo que cuando dan sus frutos son muy buena recompensa«.
¿Y si entrenas al Málaga en un futuro? «Todos tenemos nuestras aspiraciones. Estoy encantadísimo en Sabadell y aquí voy a continuar. El cariño que tengo por Málaga es muy grande. Mi hijo mayor es de allí. Renové contrato en diciembre y vivo a 30 kilómetros de Sabadell. Mucho tiempo fuera de casa. Es un club en el que me dejan hacer. Y ahora no hay mejor manera que tener esta tranquilidad». La Rosaleda echa de menos a Antonio Hidalgo. Antonio Hidalgo añora La Rosaleda. Amor verdadero.