El Unicaja 21-22 ya empieza a dibujarse en el horizonte. El club de Los Guindos ha comenzado por la renovación de Katsikaris, a falta de la rúbrica del entrenador heleno en su nuevo contrato de dos temporadas. Los malagueños tienen que revolucionar un equipo que ha fracasado este curso al quedarse fuera de los playoffs por el título por primera vez en ocho años. Para ello, Unicaja deberá cumplir la máxima de dejar salir antes de entrar. Es por eso, que el cuadro malacitano soltará lastre antes de cometer las cuatro o cinco incorporaciones que se antojan más que necesarias. Y el primero ha sido Deon Thompson.
La primera baja cajista ya ha encontrado acomodo en otro lugar. El ala-pívot ha tardado poco en firmar su salida del Carpena tras un curso en el que su rendimiento ha sido muy por debajo del esperado. El costamarfileño se marcha al Leones de Ponce de Puerto Rico. Hay que recordar que Thompson acaba contrato y que su salida no ha sido una sorpresa ya que era un secreto a voces que el Unicaja no iba a ejecutar la cláusula que tenía para ampliar su contrato una campaña más. El jugador ha quedado libre y se ha marcha por la puerta de atrás.
Deon Thompson deja muy descontento al personal en Málaga. El interior internacional era el jugador mejor pagado de la plantilla, pero su rendimiento ha sido nefasto pese a que un triple suyo casi hace soñar al Unicaja con derrotar al Real Madrid en la última jornada de la Liga Endesa. El jugador no ha convencido a nadie en sus dos temporadas como jugador cajista, algo que ha provocado que durante muchos momentos se haya llevado críticas muy duras por parte de la afición en la pista y redes sociales.
