Más de 700 deportistas extranjeros, entre nadadores, futbolistas y atletas, llegarán durante este mes de febrero a Torremolinos para llevar a cabo sesiones preparatorias en las instalaciones deportivas de la localidad.
En concreto, 22 equipos de natación, 13 de fútbol y dos de atletismo desembarcarán en el municipio en los próximos días para desarrollar entrenamientos en las infraestructuras deportivas del municipio, contribuyendo con su estancia a la desestacionalización de la localidad en esta época del año en la que la afluencia de visitantes es menor.
La natación concentra la mayoría de deportistas extranjeros que llegan en febrero hasta Torremolinos con 380 nadadores, principalmente procedentes del Reino Unido y Francia, aunque también habrá conjuntos que aterricen desde Suiza, Italia o Noruega.
La piscina Virgen del Carmen III será la instalación que albergue los entrenamientos de estos combinados foráneos, una infraestructura acuática que reabre sus puertas el próximo 6 de febrero para dar acogida a estos equipos que habitualmente entrenan en doble sesión.
Otro volumen importante de deportistas extranjeros en este mes de febrero lo concentra el fútbol, con la llegada de 290 jugadores de conjuntos procedentes de Alemania, Suecia, Rumanía, Suiza y Noruega. Los campos El Pozuelo y el recientemente renovado José Miguel González Rey `Josemi´ serán las instalaciones en las que se ejerciten estos combinados, que aprovechan el parón en sus competiciones nacionales, debido a las bajas temperaturas, para desarrollar estancias de entrenamiento en Torremolinos.
También hay que hacer referencia a la llegada en febrero de dos equipos de atletismo que aportan 50 atletas procedentes de Bélgica y Noruega. Estos deportistas se entrenarán en el estadio polideportivo Ciudad de Torremolinos.
La presencia de estos más de 700 deportistas en el municipio repercute directamente en la economía de la localidad que apuesta de forma decidida por el denominado turismo deportivo como elemento para diversificar la oferta del municipio y favorecer la presencia de visitantes durante todo el año.
La climatología, la amplia planta hotelera, las instalaciones deportivas y la cercanía de Torremolinos al aeropuerto internacional de Málaga convierten a la localidad en punta de lanza de un segmento turístico que complementa la tradicional oferta de sol y playa y que suma en esa aspiración de romper la estacionalidad.
