El consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior, Elías Bendodo, ha asegurado que durante la pasada noche el incendio de Sierra Bermeja «nos ha dejado trabajar, lo que es una buena noticia», ya que se ha podido entrar «con profundidad» en las cuatro áreas de trabajo planificadas, aunque ha señalado que el fuego «sigue vivo y consumiendo hectáreas», con más de 7.780, según ha concretado.
En declaraciones a los periodistas en el Puesto de Mando Avanzado (PMA) en Estepona (Málaga), Bendodo ha explicado que «se está trabajando en cuatro sectores de forma eficaz», por lo que ha añadido que «esta pasada noche empezamos, no digo a ver la luz porque el incendio sigue vivo y consumiendo hectáreas», pero, ha añadido, «la impotencia que teníamos era la imposibilidad de meter todos los medios en todos los frentes y esta noche hemos podido avanzar en este sentido».
El consejero se ha mostrado convencido de que este incendio «inédito en nuestro país» en el futuro «se va a estudiar porque de aquí se va a aprender cómo luchar contra estos incendios de sexta generación» y ha destacado que los medios se han «multiplicado», con 996 efectivos y 51 medios aéreos en estos momentos y con la colaboración personal y material de otros territorios de España, como la Comunidad de Madrid, Castilla la Mancha, Murcia y Extremadura.
Respecto a las personas desalojadas, ha señalado que este pasado domingo llegó a haber hasta 2.670, pero más de un millar pudieron volver a sus casas de los términos municipales de Estepona y Benahavís, aunque siguen desalojados seis municipios, que suman una población total de unos 1.600 habitantes.
Al respecto, el consejero ha indicado que la mayoría están alojados en Ronda (Málaga), precisando que en el polideportivo de dicha localidad han estado unas 80 personas, y los demás en hoteles.
Ha incidido en reconocer «la coordinación de todas las instituciones, todas». «Desde la Junta, el Gobierno de España, la Diputación provincial, todos los ayuntamientos de la zona, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Protección Civil, Cruz Roja, la coordinación ha sido perfecta», ha indicado, apuntando la previsión meteorológica, que da lluvia en las próximas horas, «ojalá ayude».
Bendodo ha querido destacar sobre todo «el papel, la profesionalidad y el compromiso de la plantilla del Infoca, más de 200 personas intentando apagar el incendio durante toda la madrugada; nos sentimos muy orgullosos de estos trabajadores».
Por su parte, la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha destacado que se «está avanzando, hay zonas aún calientes, por el momento no hay peligro de más desalojos», pidiendo «un poco de paciencia» a las personas que siguen aún fuera de sus casas, porque «vamos a intentar lo antes posible que puedan entrar en sus casas, pero hay que ser prudentes».
«Se está trabajando con una forma quirúrgica impresionante», ha reiterado Crespo, quien ha incidido también en la coordinación, en que el Infoca «es ejemplo internacional» y en que hay «un halo de esperanza que vamos a intentar aprovecharlo», destacando la solidaridad de los ciudadanos.
La consejera ha dicho que «el cambio climático es una realidad y desgraciadamente vamos a tener estas circunstancias más de lo que deseamos y tenemos que prepararnos para ellas» y ha asegurado que «todo el Consejo de Gobierno de la Junta y los alcaldes, en cuanto termine el incendio, nos pondremos en marcha para hacer la emergencia, la urgencia, actuar en la zona y un comité técnico y de expertos para la reforestación y estudio posterior».
El grueso del pinsapar «no está afectado», ha señalado, precisando que «se está intentando proteger lo máximo posible, estando muy pendiente, y la afección que ha podido haber allí es de los cercanos a los pinos, que están diseminados».
Asimismo, ha tenido un recuerdo para el bombero forestal fallecido, cuyo funeral tuvo lugar este pasado domingo, asegurando que «es un héroe y ha dado su vida por Andalucía», indicando que de los otros dos bomberos que resultaron lesionados, uno ha recibido ya el alta y el otro está esperando una prueba, «pero están bien».