El Unicaja no tuvo el mejor partido el pasado domingo contra el Casademont Zaragoza. Hubo jugadores que no estuvieron, o por problemas físicos o por falta de energía. Fue un choque donde hubo algunos de los recientemente renovados dieron un paso adelante. El caso de Kendrick Perry o la segunda mitad de David Kravish fueron algunos de los ejemplos de los que cargaron con las responsabilidades. Otro fue Will Thomas, el ala-pívot (que aún no ha renovado con el Unicaja) también se cargó el equipo a la espalda.
El jugador nacido en Baltimore logró hacer 13 puntos, la mayoría de ellos desde el poste bajo. Además, aportó 4 rebotes y 2 asistencias. El interior verde apareció en el momento que más le necesitaba el club de Los Guindos, en un partido en el que los «balones calientes» fueron para él en los momentos claves del partido. Además, Will Thomas venía de pasar varios partidos desapercibido, no daba ese paso adelante que el equipo necesitaba. Paso de gigante fue el que dio sobre el parqué del Príncipe Felipe, y ‘masterclass’ en la pintura que le dio a Dino Radoncic.
Ibon Navarro valoró mucho el esfuerzo del americano. «Había otros jugadores que no estaban demasiado finos hoy, con poca energía y con poca concentración, pero hemos encontrado siete u ocho jugadores que nos estaban ayudando. Hemos entrado en los últimos cuatro o cinco minutos igualados. Muchas veces esto es una cuestión de dinámicas. Venimos de ganar siete u ocho seguidos. Muchas veces esto te ayuda a encontrar las mejores opciones. Luego nos hemos agarrado muy bien a Will Thomas en el final de partido. Nos daba bastante pausa en el juego. Es una victoria muy importante, de mucho prestigio. Muchos equipos han perdido aquí en Zaragoza«.
