Un Saint-Supéry asentado en la élite se reencuentra con el Carpena

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Mario Saint-Supéry ante el Unicaja // Foto: ACB photo. (Joaquim Alberch).

La reanudación de la Liga Endesa tras el parón, para Unicaja brillante, no trae consigo solo el reencuentro con la competición nacional de fondo. Los cajistas librarán su siguiente batalla este mismo domingo. Enfrente tendrán al mayor verdugo que han conocido en lo que va de campaña. Un BAXI Manresa que no pasó de cuartos de final en la Copa del Rey levantada por los verdes pero, que se ha pasado estos meses atrás siendo uno de los huesos más duros de roer. Valencia Basket, Dreamland Gran Canaria, Unicaja, Barça… Todos estos gigantes se han visto superados por el equipo en el que se encuentra cedido la joya de Málaga. Así, un Saint-Supéry asentado en la élite se reencuentra con el Carpena.

El base puso rumbo a Manresa el pasado agosto, después de haber militado en Burgos el curso anterior en una LEB Oro en la que mostró muy buena cara. Tan solo unos meses después de su andadura en tierras catalanas, El Principito, parece estar en su salsa. En conjunto, su equipo se encuentra en un meritorio sexto puesto en la clasificación liguera, con un balance de 12-8. Por su parte, 7,3 puntos2,1 rebotes y 2 asistencias es lo que media durante los 13 minutos que promedia sobre la pista. Estadísticas que poco dejan entrever que son de un jugador que está dando sus primeros pasos en una de las competiciones con mayor nivel del baloncesto mundial. Mucha materia primera con la que seguir trabajando.

Números muy parecidos se observan del joven malagueño en competición continental. El BAXI Manresa comparte la BCL con el Unicaja, ahora mismo segundos del Grupo K del Round of 16, por detrás de La Laguna Tenerife. En Europa, Saint-Supéry enchufa 7,5 puntos, captura 2,8 rebotes y reparte 4,5 asistencias por duelo a sus compañeros.

Recién llegado de las Ventanas FIBA, ha sido uno de los líderes en la victoria española ante Bélgica. Mejorando sus prestaciones con respecto a la derrota en Letonia, el base tuvo plena confianza de Scariolo. 23 minutos en pista, 5 puntos, 5 robos, 4 asistencias y 9 de valoración.

Saint-Supéry ha reconocido seguir al tanto de todo lo que ocurre con el Unicaja, sin embargo, no habrá amigos cuando el árbitro pite, a partir de las 12:30 horas, el próximo domingo. La intención cajista será pararle los pies al canterano asentado en la élite.

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