El Martín Carpena brilló este domingo. La cita más especial de la jornada 5 de la Liga Endesa estuvo lo disputada que se esperaba. El Unicaja se impuso ante un Barça que quería redimirse después de perder ante el Baskonia. Sin embargo, los cajistas están hechos de pasta dura. Transcurren los partidos y los malagueños pasan por encima a todo el que tiene el valor de querer bajarles del sueño. Cinco de cinco en Liga Endesa, 13 victorias consecutivas en lo que va de campaña. Los de Ibon siguen imbatibles y, ahora, aún más líderes. Son el único equipo de toda la ACB que no conoce lo que es perder esta temporada. Will Thomas, fue testigo ayer de esto en el día de su homenaje. Esto es, un arranque con licencia para soñar.
Sin rival, hasta el momento. Desde los recién ascendidos a los pesos pesados. El Unicaja se embolsó el segundo título de la 2024/25, la primera Supercopa Endesa de su historia, ante el club de la capital. El Real Madrid sufrió a los cajistas como verdugos en una final comandada por Kam Taylor y Yankuba Sima (90-80) que puso en las vitrinas cajistas el único título nacional que le faltaba. El otro titán, el Barça. Poco más pudieron hacer los de Peñarroya en el enlace liguero en un Carpena incendiado por una marea verde que no dejó de creer y una plantilla que no les dio pie a dejar de hacerlo (103-96).
Con un plantel de 14 jugadorazos, Ibon puede estar tranquilo. La calidad individual con la que cuenta el técnico vitoriano es brutal. Baloncestistas que se ven felices jugando al baloncesto, saben qué quieren y cómo lo pueden hacer. Trabajo, trabajo y trabajo. Equipo que se ha ganado a pulso el derecho de ser ejemplo para cualquiera que se inicie en este maravilloso deporte. El Unicaja crea juego y lo reparte. Suma puntos y los para. Absolutamente activo en todos los aspectos del juego.
Se planta en la 6º jornada como el equipo más valorado de toda la liga nacional (112). El primero que más puntos anota, suma 468 en total, lo que son nada más y nada menos que 93 puntos de media por partido. Pero, es que en la parte menos agradecida, en defensa, se colocan también en primer lugar en los rebotes, más de 26 rebotes de media por choque.
A estas alturas y frente estos grandes no es ningún regalo lo que pase. Habrá que alargar todo lo que se pueda este gran inicio. Pero, siendo objetivo, este arranque viene con licencia para soñar, y a lo grande.