Este sábado el Unicaja puede lograr por fin la clasificación matemática para la Copa del Rey, pese a que se da por hecho desde hace varias jornadas que el conjunto malagueño estará en Badalona el próximo mes de febrero. Se acabarán las cábalas si se vence esta tarde (18:00) a un Río Breogán que anhela su presencia en la fiesta del baloncesto nacional; de nuevo una de las grandes revelaciones de esta Liga Endesa. Será el día de Yankuba Sima, después de haber sido presentado este viernes. Tendrá minutos el nuevo fichaje cajista, por lo que se vivirá una fiesta en el Carpena, otra vez con sus mejores galas. Se ha hecho de rogar por cómo se ha ido cocinando el fichaje, en una negociación de extrema dificultad, y donde el Unicaja ha cumplido con su propósito; no solo el poder firmarlo, sino que ya pudiese debutar este sábado.
Pero más allá de ese factor emocional de ver el estreno de Sima, el Unicaja se juega mucho esta tarde; no a nivel clasificatorio porque la posición es privilegiada, pero sí para recuperar a ese equipo imparable de hace unas semanas; una máquina perfecta de meterle a los partidos un ritmo vertiginoso y que acababa engullendo a los rivales. Se ha perdido esa frescura, por los problemas físicos, más el hueco que había dejado Lima; pero es uno de esos días para ir retomando las sensaciones del Unicaja de doce jugadores, el de las nueve victorias seguidas. Los resultados por suerte han sido excelentes, pero el equipo ha estado cogido con muchos alfileres en el último mes. Además porque está a la vuelta de la esquina el arranque del ‘Round of 16’.
Otro atractivo es ese pulso por ser cabeza de serie en la Copa; lucha algo desigual con Lenovo Tenerife después de la derrota en el Santiago Martín, no se puede obviar. Habría que esperar un tropiezo de los aurinegros, bien en Zaragoza o en La Laguna frente a Betis, y hacer pleno. Los de Vidorreta juegan además justo después de que el Unicaja acabe su partido, por lo que podría existir esa dosis de presión en los canarios.
Ha venido muy bien esta semana para ir poniendo a tono a los tocados. Brizuela ya ha dejado atrás ese esguince y regresa tras no estar frente a Bilbao Basket y Lenovo; también lo han agradecido Osetkowski y Kalinoski, los otros dos jugadores que más han preocupado en lo físico. Ibon Navarro tendrá a todas sus piezas en plenas condiciones, con el aliciente además de cuántos minutos van a ir para Sima después de su escasa actividad en las últimas semanas.
Pese a que el Unicaja es sobre el papel muy favorito, no hay que subestimar a un rival que necesita un triunfo en Málaga para estar en el torneo del ko. Con un balance de 8-7 llega Río Breogán al Palacio; dos triunfos consecutivos, y un equipo que está haciendo las cosas muy bien en su segunda temporada seguida en la élite; muy reconocibles los de Mrsic, con prácticamente los deberes hechos para seguir un año más en la Liga Endesa. Pero viendo ese sueño de la Copa tan cercano… parecía impensable en verano con la fuga de los Musa, el ahora cajista Kalinoski y el resto de sus estrellas. Ensalzar el trabajo realizado en el Pazo.
Breogán ha rascado cinco triunfos como visitante, los mismos que Real Madrid, Barça y Baskonia; dato a tener muy en cuenta. Ethan Happ y Scott Bamforth son las principales armas de los gallegos: el ala pívot es el máximo reboteador de la competición (7,3 capturas por partido); con 11,1 puntos de media y 15,1 de valoración mientras que el veterano escolta (33 años) es su jugador con más talento en ataque (13,4 puntos por encuentro). Otros nombres a tener en cuenta son los de Justus Hollatz (6,1 puntos y 3,2 asistencias), que llegó de Hamburgo en verano; Toni Nakic, ala pívot croata (8,3 puntos y 3 rebotes); o el base Sergi García.
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